El manejo de la deuda pública en pesos sigue estando en el centro de las discusiones económicas. El canje de bonos que la secretaría de Finanzas concretó ayer tuvo un resultado positivo en cuanto a que el Gobierno redujo los vencimientos para enero, febrero y marzo, pero los analistas destacaron un rasgo preocupante: la baja participación en el canje del sector privado.
Una estimación de la consultora Aurum señaló que había vencimientos en manos privadas por un billón y medio de pesos; solamente la tercera parte de esos fondos, cerca de 500.000 millones, fueron renovados.
De este modo, el Gobierno consiguió renovar el 67% de los bonos que vencían pero la mayoría de ellos estaba en manos de organismos estatales, en particular el Fondo de Garantía de la Anses. Al mismo tiempo, comenzó una peligrosa acumulación de compromisos en abril y en julio. De esa forma, pone una vara alta para los próximos meses, en particular para las semanas previas a las elecciones.
El Gobierno logró extender vencimientos de deuda por casi 3 billones de pesos
Ante la imposibilidad de acceder a financiamiento en dólares, el manejo de los vencimientos en pesos es vital ya que todo el dinero que el Gobierno no consiga en el mercado deberá ser emitido, lo que redundará en mayor inflación.
JL