Grupos de manifestantes incendiaron dos comisarías en el norte de Quito mientras sigue en punto muerto el diálogo entre la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie) y el gobierno de Guillermo Lasso después de más de dos semanas de protestas en todo el país.
La policía confirmó que las unidades de vigilancia comunitaria de las gigantescas barriadas de Calderón y Carapungo, en el extremo norte quiteño, quedaron completamente destruidas luego del ataque con bombas incendiarias. Los agentes lograron huir a tiempo. Para exigir una respuesta del gobierno, el Movimiento Indígena y Campesino de la región de Cotopaxi prepara para hoy una movilización masiva hacia la capital con organizaciones, gremios, transportistas y trabajadores.
Otra vez la cuerda se tensa en Ecuador
Cientos de indígenas de la provincia de Imbabura, al norte de Ecuador, bloquean una de las principales avenidas periféricas de la ciudad. La Conaie mantiene medidas de fuerza en seis provincias de la región amazónica, donde se encuentra la mayor parte de los pozos y la infraestructura petrolera del país.
El acercamiento entre el gobierno y la Conaie, que el lunes hacía prever una solución cercana, quedó congelado después de un ataque de presuntos indígenas contra un convoy militar que dejó un muerto y 12 uniformados heridos. Los disturbios se producen en coincidencia con el paro nacional dispuesto por la Conaie en demanda de la reducción del precio del combustible, de mayor presupuesto para salud y educación y de la fijación de precios de los productos agropecuarios.
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Las protestas se han caracterizado por férreos bloqueos de rutas que impiden el paso de alimentos, combustibles e inclusive ambulancias. El primer efecto ha sido un notable desabastecimiento en algunas ciudades, donde los precios de los productos agrícolas se han duplicado o triplicado.
Al mismo tiempo, legisladores de la oposición, principalmente del partido Unión por la Esperanza vinculado con el exmandatario Rafael Correa, fracasaron en su intento en la Asamblea Nacional de destituir al presidente Lasso, a quien acusaban de la grave conmoción social y política.
JL PAR
