El diputado venezolano Armando Armas aseguró que "la única opción" para restituir la soberanía nacional y garantizar la transición democrática en Venezuela es la intervención de Estados Unidos. En diálogo con Modo Fontevecchia, por Net TV y Radio Perfil (AM 1190), reclamó que el régimen de Nicolás Maduro aplica "mecanismos propios de las organizaciones terroristas internacionales" y mantiene al país intervenido militarmente.
Armando Armas es un político venezolano que se desempeña como diputado de la Asamblea Nacional de Venezuela, reconocido por su activismo en defensa de la democracia y de los derechos humanos de su país. Actualmente se encuentra en el exilio con actividad en el ámbito internacional, participando en foros y comités globales por el estado de derecho.
Creo que está en Europa, si no entiendo mal, en este momento cumpliendo su exilio. Queríamos una opinión de lo que está pasando en su país y sus esperanzas de que definitivamente pueda volver a él pronto.
Efectivamente, lo que está sucediendo en Venezuela es consecuencia de un proceso de desinstitucionalización de los últimos 25 años, progresivo, en el cual primero Hugo Chávez acabó con el estado de derecho y luego quien lo continúa a él, que es Nicolás Maduro. Es un régimen autocrático, criminal, violador, no solamente violador de derechos humanos. Argentina nos ayudó en su momento con el proceso ante la Corte Penal Internacional, llevando a Maduro y parte de la cúpula del régimen como perpetradores de crímenes de lesa humanidad. Adicionalmente a eso, gracias a una investigación del Departamento de Justicia de los Estados Unidos y gracias a diferentes investigaciones a lo largo de todos estos años, se ha llegado a la conclusión, a través de estas investigaciones, de que efectivamente Maduro y quienes están dirigiendo esa cúpula han hecho actividades relacionadas con el narcotráfico.
Adicionalmente vemos que los mecanismos que usan son mecanismos propios de las organizaciones terroristas internacionales, como está plenamente documentado en los informes de las Naciones Unidas en Venezuela, de la Comisión de Verificación de Hechos, las atrocidades que se han cometido, como se ha denunciado. También hay un reportaje del año 2017 en CNN, llamado “Pasaportes para el terror”, de cómo el Estado venezolano emitió pasaportes a personas vinculadas a Hezbolá y al terrorismo transnacional. Entonces llegamos a la conclusión de que todo lo que está sucediendo hoy en día en Venezuela tiene un núcleo que es el chavismo. Es ese sistema que encabeza Maduro, pero que no es solo Maduro. Por eso es que nosotros abogamos por un cambio total de sistema.
Los venezolanos por 25 años y más hemos estado comprometidos consistentemente, indefectiblemente, con la lucha no violenta. Eso, lamentablemente, lo que nos ha dejado es un saldo enorme en dolor, en lágrimas, en sangre, en víctimas, en familias separadas, en un tercio de la población venezolana, casi un tercio de la población venezolana. Es decir, aproximadamente nueve millones de personas están desplazadas a lo largo del hemisferio. Yo aprovecho y agradezco mucho a la sociedad argentina que, en Latinoamérica, sin lugar a duda, son de los que mejores han acogido a la diáspora venezolana. Se los agradecemos enormemente.
Pero si usted le pregunta incluso a los venezolanos que están hoy en día en Argentina, que se sienten a gusto, que han hecho una vida y que están comenzando a rehacer su vida en Argentina, si les hubiese gustado emigrar, seguramente le dirán que no. Entonces, esa presión que se puso con los flujos migratorios tiene también una raíz, que es el régimen de Nicolás Maduro, que ha expulsado por diferentes razones a venezolanos fuera de su frontera.
Ante eso, nosotros hemos visto que la única solución que hay para lidiar con delincuentes es la misma solución que tiene una policía que pueden tener en Belgrano o en el Tigre, en Argentina, que es que a los delincuentes se necesita buscar con la policía fundamentalmente. Los venezolanos de a pie no tenemos esa capacidad. Hemos hecho todo: hemos ido a todas las elecciones que hemos podido, hemos ganado, nos han robado, hemos denunciado internacionalmente, hemos denunciado nacionalmente, nos hemos movilizado en innumerables oportunidades masivamente. Millones de personas hemos estado en diferentes oportunidades, en diferentes años, en las calles de Venezuela. Y eso lo que nos ha dejado es un saldo de muerte, de dolor, de separación familiar, de torturas. Y ante eso, efectivamente, nosotros estamos abogando por la cooperación internacional que se base en la restitución democrática.
Cuando usted dice que la única solución para lidiar con delincuentes es mandarlos a buscar con la policía, lo que está planteando es que después de tratar de luchar durante un cuarto de siglo con métodos democráticos y pacíficamente, la única alternativa que queda es la violencia, una fuerza militar-policial superior a la de Maduro que intervenga sobre Venezuela, en este caso Estados Unidos. ¿Le estoy entendiendo bien?
Correcto, es así. Y ojalá en la región todos los países democráticos se sumaran diplomáticamente a este esfuerzo y más bien pudiera ser un esfuerzo coordinado y colaborativo entre los diferentes países de la región, atendiendo además a los principios democráticos que se enarbolan en, por ejemplo, la Carta Democrática Interamericana, que Venezuela los ha violado todos.
¿Por qué podría ser una solución militar el problema con Venezuela y nunca pudo serlo con Cuba, si esa fuera la intención de Estados Unidos?
¿Por qué la solución militar en Cuba no es igual a una situación en Venezuela? ¿Esa es la pregunta?
Sí, y al mismo tiempo, la versión que tienen los Estados Unidos con la Venezuela de Maduro no es distinta a la que tiene con la Cuba actual. Si no se consideró que podía ser exitosa una intervención militar en un país más chico como Cuba, ¿cómo lo pudiera ser en un país más grande como Venezuela? ¿Qué particularidades hay? ¿El régimen no está lo suficientemente consolidado? ¿La mayoría de la población es adversa, mientras que en Cuba no?
Hay varias razones. Lo primero que tenemos que tomar en cuenta es que cuando se intentó una solución militar en Cuba, muchos estudios hablan de cuando la operación en Bahía de Cochinos, el presidente J. F. Kennedy de aquel momento, al parecer no cumplió su promesa de enviar toda la ayuda militar que iba a enviar al momento. Fue un tema operativo, logístico. Qué pasó ahí militarmente no se sabe, pero fue un error. Quizás fue negociación en el marco del equilibrio de Guerra Fría que había en ese mundo. Recordemos que esto fue a principios de los años 60 y ya la Guerra Fría, o los equilibrios de la Guerra Fría, se habían empezado a consolidar luego de 1945.
Habiendo dicho esto, también es importante destacar que la crisis de los misiles en Cuba planteó un escenario en el cual ya había potencias consolidadas en el cual se planteaba traer, o se llegaron en algún momento a plantear tener un arsenal nuclear en el hemisferio occidental. Eso no es el caso de hoy en día porque, como los expertos saben, rige por el Tratado de Tlatelolco, que impide el uso de armas nucleares en el hemisferio. Armando, sí, parte.
El tercer elemento es el tema de la proximidad geográfica. Como usted sabe, Cuba se encuentra solamente a 90 millas de Estados Unidos y las repercusiones que ellos tuvieron en su planificación no les daba para eso. El cuarto elemento es el tema de la sociedad. La sociedad civil venezolana, sistemáticamente, por un cuarto de siglo, se ha manifestado en resistencia y en contra, usando mecanismos democráticos para resistir al régimen antes de Chávez y hoy en día de Maduro. No ha sido el caso de la sociedad cubana, que ellos cerraron cualquier posibilidad por el tema del partido único y el sistema de partido único del comunismo.
Y uno pudiera agregar que la potencia de la ex Unión Soviética hoy no existe y Estados Unidos es la potencia militar hegemónica, y lo que sería la continuación de la ex Unión Soviética, Rusia, está bastante preocupada con su frente de batalla en Ucrania. O sea, que Estados Unidos hoy tiene menos dificultades. Ahora, ¿por qué no lo hace hoy con Cuba también? Un elemento importante a tener en cuenta es qué papel juega el terrorismo convertido en narcoterrorismo y qué papel juega el petróleo. ¿Comparte esta visión?
En parte. Yo creo que Cuba es un país que tiene todo para ser libre y democrático. Cuba ha parasitado a los países con los que ha hecho alianza. Tengamos en cuenta que hoy en día el principal, la principal línea de ingresos de Cuba es lo que llaman los esquemas de esclavitud moderna con los médicos cubanos afuera. Ellos brindan médicos a diferentes partes del mundo y cobran una cantidad de dinero que la mayor parte se la queda el Estado y luego le pasan un mínimo porcentaje de eso a los médicos para su subsistencia. Ese es un esquema que alguien lo ha tratado de esclavitud humana. No solamente con los médicos, por cierto: hoy en día también están enviando parte de sus fuerzas armadas a trabajar en esta misma modalidad a Rusia como combatientes.
Entonces, el tema de la operación en el Caribe no es solo un tema sobre Venezuela. Creo que es un tema para ayudar a los pueblos del hemisferio occidental que están oprimidos a poder salir de las cadenas que los oprimen. Y en las cadenas que los oprimen no solamente es el narcoterrorismo, sino los sistemas afiliados a este esquema de narcoterrorismo, como es Cuba, como es Nicaragua, como es Venezuela. Y como consecuencia a tener el corte de los flujos de dinero producto de estas actividades ilícitas en estos países con regímenes que lo sostienen, eso va a hacer que, no solamente el régimen de Venezuela, sino el de Cuba y eventualmente el de Nicaragua caiga también. Cuba ha parasitado a Venezuela por los últimos años con envíos, con diferentes mecanismos, pero sobre todo con el envío de petróleo gratuito que Venezuela le regaló a Cuba los últimos años.
¿Y entonces usted cree que va a haber una intervención militar de los Estados Unidos en Venezuela y que va a ser exitosa?
Lo primero que tenemos que decir es que ya Venezuela está intervenida militarmente. Entonces, en realidad, por lo que se está abogando es por una cooperación militar para la restitución de la democracia en Venezuela. Y esto es muy importante que lo tengamos claro, porque tenemos que tener muy claro el concepto de soberanía. La soberanía, según el artículo 5 de la Constitución de Venezuela, reside en el pueblo, que la ejerce indirectamente a través del voto y que la ejerce directamente a través del ejercicio de los derechos que la misma Constitución plantea. Ninguno de los dos presupuestos se ha dado para decir que Venezuela es hoy en día un Estado soberano. No se respetan los procesos electorales, como vimos el 28 de julio del año pasado, y no se respeta tampoco el ejercicio de los derechos, como está en los diferentes informes de verificación de derechos de Naciones Unidas y otros diferentes informes.
Hoy en día Venezuela no es un Estado soberano y el régimen de Venezuela no es un gobierno legítimo. En este sentido, nosotros lo que estamos abogando es por la cooperación internacional para la restitución de la soberanía venezolana y que nos den a los venezolanos poder decir sobre nuestro destino. Hasta los momentos está siendo oprimido, no solamente por Venezuela, sino por sus aliados nacionales e internacionales, estatales y no estatales. El narcoterrorismo es parte de esta red, pero también está Cuba, también están China, Rusia e Irán, que operan dentro de Venezuela y le dan apoyo logístico, de inteligencia, militar y diplomático al régimen.
Venezuela hoy en día ya es un territorio ocupado, y nosotros estamos buscando cooperación para restituir nuestra soberanía nacional. Ante eso, la única opción posible que vemos hoy en día es la cooperación con Estados Unidos, que es la potencia más importante, al menos en nuestro hemisferio. Sobre si va a ser exitosa o no, tenemos el talento, tenemos la voluntad y tenemos las ganas de la gran mayoría de venezolanos para llevar a Venezuela adelante un proceso de liberación que implique la estabilización del país, que implique el respeto a la decisión que tomamos de que Edmundo González Urrutia sea nuestro presidente y que María Corina Machado, nuestro Premio Nobel de la Paz, encamine el rumbo con las estrategias que ha trazado. Es lo que deseamos todos los venezolanos. Y si Estados Unidos está en la disposición de ayudarnos, pues bienvenido sea y agradecidísimo. Y los países democráticos, como la Argentina, que quieran ayudarnos en este sentido, bienvenidos sean.
Vamos a ser exitosos en la medida que logremos estabilizar entre los venezolanos y la comunidad internacional la situación dentro de Venezuela, para que podamos tener un nuevo esquema de regla y respeto al Estado de derecho para asumir las riendas de los destinos del país, del diseño de políticas públicas y del esquema empresarial. Es decir, tenemos todo para salir adelante y ser exitosos. ¿Es un riesgo? Sí, es un riesgo. ¿Va a ser de inmediato? No creo que sea de inmediato, quiero decir, en temas de horas, la estabilización del país. Pero es mejor eso a seguir padeciendo lo que los venezolanos estamos padeciendo hoy en día y con las implicaciones que tiene en el hemisferio, en el mundo en general.
TV/ff