El lunes fue un día negativo para los mercados globales, en particular porque las tensiones políticas en China arrastraron a las Bolsas de todo el mundo. La excepción fue la Argentina.
Los golpeados bonos en dólares de la deuda argentina, que desde hace mucho tiempo tienen valores acordes a un default, tuvieron una jornada llamativamente buena y registraron subas de hasta el 7%. En el plano cambiario, también hubo una jornada tranquila, sin grandes movimientos en ninguna de las cotizaciones del dólar.
En el mercado circuló una explicación para tanto optimismo: las declaraciones de Máximo Kirchner acerca de que su madre, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, no será candidata a la presidencia en 2023. Algunos operadores vieron el comienzo del "trade electoral", de una hipotética suba de los activos argentinos si hay cambio de signo político a partir del próximo gobierno.
Cómo tomó la Casa Rosada las declaraciones de Máximo Kirchner
Si bien los precios de la deuda argentina son tan bajos que pueden tener oscilaciones fuertes en ambos sentidos, por lo que la súbita suba de ayer podría evaporarse con la misma rapidez, la aparición en el escenario de un dato político "pro-mercado" dio una señal de lo que podría ocurrir con los mercados durante el año electoral.
BL PAR