El sexto mes del año llegó recargado como un combo explosivo de aumentos: electricidad, transporte, colegios privados, prepagas y también tiene su impacto en los aranceles que deben pagarse por las gestiones de patentamiento y transferencia de vehículos.
En ese sentido, la Dirección Nacional del Registro de la Propiedad Automotor (DNRPA), hizo público el listado con los nuevos aranceles de costos fijos para los distintos trámites relacionados con los vehículos en Argentina.
Cabe destacar, que los nuevos valores que entraron en vigencia el 1º de junio, representan en algunos casos una suba que supera el 20%, porcentaje calculado sobre las tarifas que se cobraron durante el primer semestre del año. De este modo, los nuevos valores se incrementaron considerablemente para algunos trámites, por lo cual varían entre los $230 y los $65.000, dependiendo también del tipo de auto por el cual se realiza la gestión.
Los trámites más frecuentes
Los usuarios de vehículos conocen a la perfección que entre los trámites más frecuentes se encuentra la “certificación de firmas”. Respecto de esta gestión, hasta el mes de mayo inclusive, se manejaron aranceles fijos por valor de $940 por firma y por papel. Desde junio, con la vigencia de los nuevos incrementos, el costo por este trámite es de $1.130, lo que implica una suba de $190 adicionales.
También debe tenerse en cuenta, que en el caso que la certificación requiera el trámite de acreditación de la personería del firmante, además deberá pagarse una suma de $1.420 por cada firma, lo que en este caso representa entonces, $ 240 adicionales en comparación con lo que se abonaba en mayo último ($ 1.180).
A su vez, otros trámites tan comunes como necesarios son: el informe y certificado sobre el estado de dominio del vehículo, la consulta de legajo, la rectificación de datos, el certificado de transferencia y los duplicados de certificado de baja del automotor, motor o chasis. En estos casos, todas estas gestiones subieron sus valores con una nueva tarifa que pasó de $190 a $230 en junio cada trámite.
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Por su parte, el informe de estado de dominio y el nominal histórico tendrá un nuevo valor de $130 adicionales. En caso que el trámite se requiera de forma urgente, el arancel es de $180 extras. Hasta aquí, son los trámites con costos vigentes que reflejan el aumento con precios más accesibles, otras gestiones que se realizan en el organismo tuvieron un impacto con precios más elevados.
Nuevos aranceles para las cédulas verdes y azules
Uno de los trámites más habituales por el cual la gente concurre a las oficinas del registro del automotor, es precisamente la solicitud de cédulas de identificación del automotor. Según el caso, será la emisión de la credencial verde o azul, ya sea por vencimiento o extravío de la original.
Cabe recordar que la cédula verde, Cédula Única de Identificación del Vehículo, la extiende el Registro del Automotor, conjuntamente con el título de propiedad, cuando una persona compra un auto 0 km o un usado. Esta cédula estará vigente durante el primer año desde la emisión por el organismo. Sin embargo, en caso que el vehículo sea conducido por una persona que no es su titular, y siempre que la cédula verde esté vencida, se deberá contar con la famosa cédula azul.
Por estos trámites, ya sea por la credencial verde o la azul, hasta el mes de mayo pasado se pagaba un arancel de $1.220 por cada una. Sin embargo, desde la entrada en vigencia de los nuevos valores actualizados, la emisión costará $1.350, lo que refleja una suba de casi el 11%.
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Duplicado de patentes
También puede suceder que un titular necesite pedir el duplicado de la chapa metálica de identificación, la placa de la patente propiamente dicha, y en tal caso desde junio se deberá abonar $3.890, cuando hasta mayo se pagó $3.540.
Un 20 % más caro: aranceles con “techo”
No obstante los trámites más habituales reflejan valores promedio que van entre los $230 y los $4.000, ciertas gestiones tendrán un impacto mayor en la economía de los usuarios de autos, con valores ostensiblemente más elevados.
En el caso de la inscripción inicial de automotores considerados “clásicos”, los nuevos aranceles de junio alcanzan el costo de $51.000. Este aumento representa un incremento del 20%, equivale al pago de $8.500 adicionales sobre el valor que se abonaba hasta mayo, cuando la gestión costaba $42.500 pesos.
Sin embargo, este mismo trámite desde junio tiene un valor aún más caro, que alcanza los $65.000, cuando el automotor tenga como destino el transporte de pasajeros o de carga, como sería el caso de micros y camiones. Por lo tanto, en esos casos se deberán pagar $11.000 más que lo que se abonaba en mayo. Es importante saber que dicho monto será el “techo” o “tope” para esa clase de operación.
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Para que no se preste a confusión: lo habitual por dicho trámite es pagar el 1,5% del valor del vehículo, hasta un 2% si es importado, siempre conforme la tabla de valuaciones de la DNRPA. Pero en aquellos casos, en que la aplicación de esos porcentajes resulte en valores superiores, es cuando entonces se aplicará el “techo” de los $65.000.
En igual sentido, se aplica el nuevo arancel en las transferencias de ese tipo de vehículos. Hasta mayo el valor máximo que se pagó fue de $43.000, pero desde junio se deberá abonar $52.000.
Aún por debajo de los índices inflacionarios
Es cierto que junio llegó con aumentos que se hacen sentir y con subas que superaron el 20% en ciertos trámites, sin embargo, hay que señalar que estos valores no solo no se actualizan en forma regular, sino que además en el último año tuvieron un aumento promedio del 44%, cuando los niveles de inflación superaron holgadamente el 100 % interanual.
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En ese sentido, el costo de la certificación de firmas tuvo un aumento de tan solo $350 en los últimos doce meses. Desde junio tendrá un nuevo arancel de $1.130, cuando en el mismo mes hace un año tras se pagaba por esa misma gestión un costo de $780.
Por consiguiente, podría decirse, en términos reales, que los aranceles en general se abarataron, sin dejar de tener presente que por mínimo impacto que genere una suba de los costos, se refleja como un duro golpe a los asalariados en un contexto con gran pérdida del poder adquisitivo.
La única tabla de actualización regular cada 30 días es el arancel del 1,5% sobre la valuación de la DNRPA, donde las subas sí pueden ser similares o superiores al índice de inflación general.
JL