El escritor Pedro Saborido dialogó con Jorge Fontevecchia en Modo Fontevecchia por Net TV y Radio Perfil (FM 101.9), y contó la importancia que tiene haber sido nombrado como Personalidad Destacada de la Cultura. Además, cuánto ayuda el humor para enfrentar momentos sociales complejos y el valor del chiste en el discurso diario.
Fuiste declarado Personalidad Destacada de la Cultura. ¿Qué representa este reconocimiento?
Espero que no sea como una clausura. Recibí muchos premios y es lindo para quienes estamos en los medios de comunicación. En mayor o menor medida tenemos un espíritu entre infantil y vanidoso. Necesitamos esos reconocimientos, nos hacen bien y estimulan. No hay que corre detrás de ellos todo el tiempo, pero cuando vienen son un interesante masaje al ego.
¿Es más difícil hacer humor en una situación de crisis como la que vive Argentina?
Sí, siempre. Lamentablemente es más necesario porque acompaña, aunque no es una solución de las cosas. El humor es un analgésico, no un antibiótico.
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¿El humor permite decir lo políticamente incorrecto de una manera más digerible?
Es una forma más amable, una agresión dulce. En términos cotidianos usamos un chiste para decirle algo a alguien. Incluso, la aclaración de que se trata de un chiste amortigua el enojo de la otra persona. El mensaje es suavizado y el humor permite en la gente acercarse de una mera clara. Por eso los ingleses manejan mucho el humor, porque con la ironía evitan ser hirientes. Aun cuando el humor pueda ser hiriente, lo va a ser menos que si utilizamos formas más brutas o directas de decir algo.
JL PAR
