Revolucionario uso de lA: el caso de quienes volvieron a hablar con el pensamiento
Cuando las empresas que desarrollan las nuevas tecnologías lo aplican a la medicina. Se trata de un avance trascendental para la medicina, nunca antes logrado.
lA: el caso de quienes volvieron a hablar con el pensamiento |
Télam
La versatilidad de las nuevas tecnologías en base a Inteligencia Artificial y así que no nos dejaban capacidad de asombro, desde los buenos usos con la superioridad y el poder del revolucionario ChatGPT, los diversos sistemas de creación de imágenes automáticas y la IA aplicada a desarrollos y avances científicos.
Sin dejar de lado, que también se desplegó el mismo variado abanico de usos en el sentido contrario, el mal uso de estas tecnologías puede convertirse en un real peligro, si está en manos de inescrupulosos.
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No obstante, cuando todo ya parecía no sorprender, las nuevas herramientas que trabajan con el poder de la IA, y con la corta historia de vida de estas nuevas tecnologías, una vez más dejan al mundo perplejo.
El buen uso de la IA: sistema pionero
En ese contexto, dos equipos trabajaron en forma independiente, llegaron a un mismo resultado final con aplicación de IA. Por un lado, los investigadores de la Universidad de California en San Francisco (UCSF) y de la Universidad de Berkeley, en Estados Unidos, y por separado el equipo de neurocientíficos de la Universidad de Stanford, California, Estados Unidos, desarrollaron una innovadora tecnología que logró lo que ninguna otra: conectar el cerebro con la computadora.
Este revolucionario sistema hizo posible que dos mujeres estadounidenses, que sufren de una grave parálisis cerebral, con uso de IA e implantes cerebrales volvieran a hablar a partir de sus pensamientos.
Ambas mujeres, Ann y Pat Benet, pudieron volver a comunicarse hablando mediante el uso de un avatar digital. Este es un sistema pionero. De hecho, es la primera vez que los científicos logran sintetizar el habla o las expresiones faciales a partir de señales cerebrales mediante aplicación de inteligencia artificial. Asimismo, el sistema es capaz de decodificar estas mismas señales en texto y transformarlas a casi 80 palabras por minuto.
Ese tipo de interfaces “pueden decodificar el habla a 62 y 78 palabras por minuto”. Mientras “la conversación natural se produce a unas 160 palabras por minuto, pero las nuevas tecnologías son más rápidas que cualquier intento anterior”, destacan los especialistas.
Cómo hace posible recuperar el habla
El sistema fue entrenado durante meses. Así de la mano de Ann, una de las pacientes que logró volver a hablar, se emprendió un trabajo profundo y en equipo para entrenar los algoritmos de inteligencia artificial del sistema. De este modo se logró que reconociera sus señales cerebrales únicas para el habla.
Esta ardua tarea implicó, en el caso de Ann, repetir diferentes frases de un vocabulario de 1.024 palabras, una y otra vez, en forma reiterada y constante hasta que la computadora reconoció los patrones de actividad cerebral asociados con cada uno de los sonidos básicos del habla de la paciente.
Los especialistas usaron en Ann, un método que consiste en implantar un rectángulo delgado como un papel que contenía 253 electrodos en la superficie de la corteza cerebral. La técnica, denominada electrocorticografía (ECoG), se considera menos invasiva y puede registrar la actividad combinada de miles de neuronas al mismo tiempo.
Los investigadores insertaron, en el caso de la paciente Pat Benet, conjuntos de pequeños electrodos de silicio en partes del cerebro que intervienen en el habla.
Luego, entrenaron algoritmos de aprendizaje profundo para reconocer las señales únicas en el cerebro de las pacientes cuando intentaban pronunciar varias frases utilizando un conjunto de vocabulario grande de 125.000 palabras y un conjunto de vocabulario pequeño de 50 palabras. Mediante un software que traduce los intentos de habla, son grabados por sensores en el cerebro y luego se convierten en palabras en una pantalla.
En Estados Unidos, por separado, estos dos equipos de investigadores consiguieron colocar implantes de lectura cerebral, mejorados con ayuda de inteligencia artificial(IA). Una vez implantados estos dispositivos lograron que dos personas con parálisis pudieran comunicarse con una precisión y rapidez sin precedentes. Los revolucionarios avances fueron publicados en dos estudios en la prestigiosa revista Nature.
Dos casos paradigmáticos del uso extraordinario de la IA
Por un lado, el caso de Ann, quien con apenas 30 años, perdió el control de todos los músculos del cuerpo sin siquiera poder respirar, tras haber sufrido un derrame cerebral. Pasó cinco largos años, con miedo a morir mientras dormía, lo que llevó años de tratamiento y fisioterapia. Si bien logró mover los músculos faciales, aquellos que le hubiesen permitido hablar permanecieron totalmente paralizados.
Ann, es actualmente una mujer de 47 años perdió la capacidad de hablar hace 18 años, pero tras un implante cerebral que usa inteligencia artificial para comunicarse pudo volver a hablar. Por su parte, Bill, el cónyuge de Ann remarcó que "fue emocionante verla pasar de 'vamos a intentar hacer esto' a verlo suceder más rápido de lo que probablemente nadie pensaba".
Otro caso es el de Pat Bennett, de 67 años, una paciente que sufre de esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y también se sometió a una técnica de implante cerebral con inteligencia artificial.
Los científicos a cargo de estos estudios, desarrollaron una interfaz para interpretar la actividad neuronal a nivel celular y traducirla a texto.
“Ahora es posible imaginar un futuro en el que podamos devolver la conversación fluida a alguien con parálisis, permitiéndole decir libremente lo que quiera con una precisión lo bastante alta como para que se le entienda con fiabilidad”, afirmó Francis Willett, neurocientífico de la Universidad de Stanford, California, Estados Unidos y coautor de uno de los trabajos.
