En un largo boletín en Instagram, acompañado con fotos de la pareja cuando eran jóvenes, la escritora Siri Hustvedt informó la situación actual de su marido, Paul Auster, de 76 años.
Entre otras cosas informó que Auster terminó una nueva obra titulada “Baumgartner”, “un pequeño libro tierno y milagroso” que se publicará en noviembre.
“Todavía no hemos llegado a la señal que marca el límite del país: está saliendo de Cancerlandia”, que es como define Hustvedt a este territorio en el que viven los enfermos de cáncer. Es, dice, un país más “grande de lo que había imaginado”.
Cáncer: concientizar y actuar en la prevención
Lo que más le sorprende a la autora de obras como “El verano sin hombres” o “La mujer que mira a los hombres que miran a las mujeres” es la cantidad de gente joven que hay en las salas de espera del centro oncológico que frecuenta con su marido, cuya enfermedad fue anunciada en marzo.
"Puede ser tentador considerar Cancerlandia como un país aburrido, triste y peligroso donde nadie vive realmente, sino que sólo espera, un limbo de citas, pruebas, fármacos, exploraciones e infusiones que hay que soportar hasta que el paciente es enviado al cielo de la vida o al infierno de la muerte. Pero eso es un error”, sentencia la escritora.
“Me ha dicho que no tiene miedo a morir”, asegura Hustvedt, y subraya luego la importancia de la gentileza del personal sanitario y de los mensajes de familia y amigos, que forman parte de todo aquello que ayuda a vivir el proceso.
BL JL