Todo vale en la batalla, pero el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha levantado ampollas en la opinión pública por posar con su esposa, Olena Zelenska, en la portada de la revista de moda Vogue.
Han pasado cinco meses desde que las tropas de Vladimir Putin iniciaron la invasión de Ucrania y Zelenski quiere que el mundo no se olvide de que la guerra continúa. Las fotos fueron tomadas por la famosa fotógrafa Annie Leibovitz.
En el amplio reportaje, Zelenski dice que Olena es su mejor amiga y una gran patriota. Además, reconoció que lleva meses sin ver a sus hijos por razones de seguridad.
En estos meses, Olena también ha aparecido en la revista Time, en el Corriere della Sera, en El País Semanal, en Saturday de The Guardian y en NBC News. En Vogue, ella posa para la cámara de Leibovitz en su palacio residencial y junto a los escombros del aeropuerto de Kiev con ropa de diseñadores ucranianos.
La publicación ha provocado mucho ruido. Reproches, en realidad, por la aparente frivolidad. Es la palabra más utilizada para criticarla. Muchos se preguntan si es ético hacerse fotos de moda tomando la guerra como fondo y si se puede lucir el vestido de un diseñador ucraniano junto a una soldado que mañana puede haber muerto en combate.
Dudas mientras se calcula que han muerto unos 30.000 ucranianos desde el 24 de febrero.
JL PAR
