Este viernes, cientos de trabajadores gastronómicos de la Ciudad de Buenos Aires marchamos en defensa de nuestros postergados derechos, cansados de la apremiante situación que nos encontramos atravesando y cuyas consecuencias son ignoradas por la central de Uthgra nacional, de Luis Barrionuevo.
Comenzando por salarios que se encuentran muy por debajo de las necesidades de cobertura de los trabajadores de uno de los sectores que más reactivación han mostrado desde la disminución de la pandemia, merced a la necesidad de recuperar el tiempo de encierro en los habitantes de la Ciudad, sumada a una progresiva reactivación turística debido a la importante devaluación del peso.
Sin embargo, esta situación de innegable y rápida reactivación del sector no ha conmovido a los empresarios hoteleros y gastronómicos ni a los dirigentes de la Uthgra a nivel nacional, comandados por Luis Barrionuevo, a promover aumentos de salarios que corran en línea con la desmesurada inflación de casi el 90% interanual a la fecha.
Por este motivo, los gastronómicos porteños comandados por Dante Camaño iniciamos un plan de lucha por mejoras, que dio comienzo con la movilización de este viernes. La comisión ejecutiva de la seccional CABA movilizó a todo el cuerpo de delegados y una gran cantidad de trabajadores hacia las cámaras del rubro, al Hotel Hilton de Puerto Madero y la mismísima sede nacional de la Uthgra, donde frente a los balcones de las oficinas de Barrionuevo expusimos los reclamos por la reapertura inmediata de las negociaciones paritarias, un bono de fin de año para todos los trabajadores y el cumplimiento por parte de las empresas de los convenios colectivos de trabajo, que deben ser urgentemente modificados.
La desatención de la obra social ha derivado en intolerables demoras
Un párrafo aparte mereció en la protesta la constante situación de deterioro de los servicios de la obra social gastronómica (Osuthgra), cuyo estado de desatención ha derivado en intolerables demoras en la atención de los afiliados y sus familias, quienes pueden llegar a esperar hasta seis meses para conseguir un turno en las diversas especialidades, para las cuales además deben abonar bonos de sumas adicionales para el momento de la atención, dejando en estado de indefensión a personas que sufren de enfermedades crónicas o terminales, que en muchos casos deben optar (cuando pueden hacerlo) por direccionarse hacia la onerosa atención privada.
También reclamamos por la conducta de la cúpula de la Uthgra respecto de los numerosos obstáculos que está instrumentando, mediante el bloqueo de cuentas y diversas maniobras, que impiden a la seccional CABA cumplir con sus obligaciones fiscales mientras dilapidan los fondos de la recaudación de la seccional en otros menesteres ajenos a las necesidades de los afiliados.
Por último, también hicimos mención a la lamentable actitud tomada por la dirigencia nacional frente las nuevas delegaciones elegidas por los trabajadores de diversos establecimientos, a las cuales pretende desconocer por el solo hecho de no responder a la lista Azul que apadrina Luis Barrionuevo (y que perdió las elecciones por el 80% de los votos el 2 de diciembre de 2021), debilitando deliberadamente a la representación gremial elegida por los trabajadores, llegando a enviar notas a las empresas e instándolas a desconocer su legitimidad.
Este viernes, los trabajadores gastronómicos de la Ciudad de Buenos Aires nos plantamos ante quien fue nuestro histórico líder, en busca de una vuelta de página que haga emerger una nueva dirigencia que restaure los derechos prorrogados por la desidia, la impericia y la indolencia de sus actuales representantes nacionales.
* Secretario administrativo Uthgra, seccional CABA.