La Compañía Hongaresa de Teatre, cumple 25 años en 2020, la formamos junto con Lluïsa Cunillé y Lola López. Ha producido casi un treintena de espectáculos que han girado por muchas ciudades de España así como de Argentina, Chile, Uruguay y Colombia.
Las propuestas de esta compañía siguen naciendo desde la necesidad y el deseo de explorar nuevos territorios dramatúrgicos y acercar la mano al fuego sobre los grandes y pequeños dolores del ser humano. Para Hongaresa el teatro es refugio y mirador. Atalaya y sótano. Mesa redonda para la juntura y el comulgue laico. Para el latido colectivo verdadero. Para refugiarse de los francotiradores de las tarjetas de créditos y abrazar antiguas preguntas. Para la sinfonía de sístoles y diástoles vecinales. Espacios para compartir el dolor y la risa. Espacio para la belleza ilimitada del que mira y no encuentra.
Piedra y encrucijada nació de mi deseo y mi necesidad de escribir sobre la encrucijada de un antepasado, un astrónomo matemático del siglo XV, que se llamaba igual que yo… Un astrónomo que se enfrentó a varias encrucijadas tremendas, ya que siendo sacerdote sus descubrimientos se hermanaban a las teorías heliocéntricas en unos años previos al giro copernicano. Después de un año de trabajo, de documentación, Zarzoso decidió desechar todo ese material… y hablar de una encrucijada mucho más cercana, menos épica: la de su propia vida… Quería hablar con el espectro de su padre… pero dirigido por mi propio hijo, el actor y director Marcos Sproston.
Piedra y encrucijada contiene un gran manifiesto poético de amor al teatro a través del encuentro de un personaje (el propio autor) con su encrucijada personal, pero que se convierte en el portavoz de encrucijadas más universales. El personaje se encontrará en esta tragicomedia con el padre, el hijo, la espíritu santa… o otras sorpresas teatrales, algunas de las cuales han sido incorporadas a última hora para las actuaciones en Argentina.
Durante toda la obra se establece un juego teatral. Una y otra vez se rompe la cuarta pared. Se vuelve a construir y se vuelve a romper.
Para mí fue importante utilizar mi autobiografía para hablar de una persona frente a una encrucijada, pero con la intención de universalizar esa disyuntiva y que cualquier espectador pueda sentir mis tensiones como suyas. En ese juego ha ayudado el humor, porque ciertamente porque el autor- intérprete se pone a los pies de los caballos, pero riéndome de él mismo.
Frida Kahlo y León Trotsky, los amantes de la casa azul
El resultado es una comedia existencial en la que se abordan los temas que preocupan a todos los seres humanos. Algunos más profundos y otros más frívolos.
Para Hongaresa ha sido una gran alegría poder traer este trabajo a Argentina ya que este país ha sido muy importante en la propia encrucijada del autor. En la propia obra hay referencias constantes sobre el Argentina, tanto de Córdoba como de Buenos Aires.
El estreno en el Festival Mercosur fue muy exitoso, con un público entregado que disfrutó con nuestra propuesta.
Para Hongaresa viajar a Argentina siempre es inspirador por darnos la oportunidad además de poder ver propuestas teatrales en uno de los lugares teatralmente más calientes del mundo.
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Piedra y Encrucijada. Tres únicas funciones en Buenos Aires: sábado 19, domingo 20 y lunes 21 de octubre a las 20 hs en ½ Mundo Club de arte. Hipolito Yrigoyen 2148 2º piso. Congreso
