Carlos Carrascosa, por el momento el único condenado por el encubrimiento del crimen de su esposa María Marta García Belsunce, reconoció hoy que el ex fiscal de la causa, Diego Molina Pico, es “la única persona que odia en el mundo”.
El fiscal “nunca nos creyó, nos hizo la vida imposible a todos, hizo estragos a nivel emocional”, aseguró el viudo en declaraciones a radio La Red y afirmó que si Molina Pico “hubiera hecho su trabajo el día del velorio, no estaríamos acá”.
El fiscal de San Isidro asistió el 27 de octubre del 2002 al velatorio de María Marta García Belsunce. Su colega, Romero Victorica, había solicitado su presencia ya que tenía dudas con respecto a las circunstancias en las que se había dado la muerte de la socióloga.
Aunque durante el proceso contra Carrascosa, Molina Pico insistió en que hubiera sido imposible que el viudo no notara los orificios de bala que la víctima tenía en la cabeza, el fiscal nunca ordenó la realización de la autopsia el día del velorio (pese a que se trataba de una “muerte violenta”).
En la entrevista radial, Carrascosa volvió a afirmar su inocencia y dijo estar convencido de que fueron ladrones quienes asesinaron a María Marta.
“(Nicolás) Pachelo es solamente una de las posibilidades”, dijo el viudo, en referencia al vecino del country Carmel que en varias oportunidades fue señalado por la familia Belsunce como el asesino. “No quiero acusar a nadie. Si lo supiera, ya habríamos descubierto al homicida”, insistió.
Carrascosa fue condenado a 5 años y medio de prisión por el encubrimiento del crimen de su esposa. Mientras espera que la sentencia quede firme, cumple prisión domiciliaria en el country de su amigo Héctor Liñeiro.