La Justicia definirá en un plazo máximo de tres días si Carlos Carrascosa, condenado a cinco años y medio de cárcel por el encubrimiento del crimen de su esposa María Marta García Belsunce, sigue preso en un penal o recibe el beneficio de la prisión domiciliaria.
Los miembros del Tribunal Oral en lo Criminal 6 de San Isidro fijaron ese plazo para pronunciarse luego de entrevistar ayer al mediodía durante una hora al viudo, quien les solicitó personalmente que accedan a concederle una prisión morigerada.
En la audiencia, Carrascosa expresó a los jueces que su amigo Héctor Liñeiro, también viudo, será el garante de que cumplirá con los requisitos del beneficio en su casa del country CUBE de la localidad bonaerense de Escobar, donde vivió hasta que fue detenido el día de la sentencia.
Presiones. Al término de la reunión, el abogado Alberto Cafetzoglus aseguró que no tiene muchas esperanzas de conseguir que a su cliente le otorguen el beneficio. " Esta causa tuvo tremendas presiones mediáticas y que han podido, creo yo, afectar la libertad de decisión de los jueces", dijo el letrado.
Además, cuestionó que el viudo esté preso por el delito de encubrimiento sin una condena firme.
"Fíjense cuántos presos hay por encubrimiento y ahí van a sacar la conclusión de si esto es fácil o no. No debe haber ni tres presos por encubrimiento en la provincia de Buenos Aires", sostuvo.
Además, el letrado recordó que el ex agente de bolsa, cuando fue detenido por primera vez en 2003 acusado del crimen, se entregó voluntariamente a la Policía y que no hay peligro de fuga.
Peligro de fuga. "¿Qué peligrosidad puede representar Carrascosa? Lo conocen hasta en Madagascar. ¿Adónde va a ir?", ironizó Cafetzoglus.
Sin su habitual bigote blanco, ya que en la cárcel bonaerense todos los presos deben estar afeitados, Carrascosa llegó a las 11:20 a la sede del TOC 6 de San Isidro, en avenida Del Libertador 16526.
El viudo fue trasladado por personal del Servicio Penitenciario Bonaerense desde la unidad 41 de Campana y se lo vio vestido con un suéter azul y con algunos kilos menos que el día de su condena.
Previo al encuentro con la presidenta del tribunal, María Angélica Etcheverry y los vocales Hernán San Martín y Luis Rizzi, Cafetzoglus dijo que Carrascosa le contó que en el penal "limpia los patios" y que "no tiene problemas con sus compañeros".
El defensor sólo se mostró confiado en poder revertir el fallo condenatorio ante la Cámara de Casación Penal bonaerense porque "la sentencia de la mayoría tiene gravísimos defectos técnicos".
"Partiendo de esa base, podria decir que tengo expectativas positivas", remarcó.
En la sentencia, Etcheverry y San Martín ordenaron la detención de Carrascosa al señalar que más allá de que el imputado siempre estuvo a derecho, el hecho de que ahora exista una condena, implica un peligro de fuga.
En cambio, sus defensores sostienen todo lo contrario y pidieron que tenga un régimen de prisión domiciliaria hasta tanto el fallo quede firme en la Cámara de Casación.
Los abogados argumentaron que Carrascosa nunca eludió el accionar de la Justicia y que cuando fue detenido durante la instrucción acusado del homicidio de su esposa él mismo se entregó a la Policía.
Ante este pedido, durante el último mes, el TOC 6 de San Isidro entrevistó a Liñeiro, el amigo y garante de Carrascosa, y mandó a elaborar un informe socioambiental de su casa en el country CUBE.
Carrascosa fue juzgado entre febrero y julio de este año por el crimen de su esposa María Marta García Belsunce, quien fue asesinada de seis balazos en la cabeza el 27 de octubre de 2002 en su casa del country Carmel de Pilar.
Si bien el viudo llegó al debate acusado de ser el autor del crimen, fue condenado por encubrimiento agravado a cinco años y seis meses de prisión.
Fuente: Télam