Encontraron muerto a Carlos Alberto Liñani, uno de los imputados en la causa por asociación ilícita encabezada por Marcelo D’Alessio. El cuerpo del despachante de aduana fue hallado en su departamento del barrio porteño de Palermo el pasado martes.
Con la hipótesis del suicidio en mente, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°46, a cargo de Adrián Pérès investiga la muerte de Liñani, quien había sido procesado en agosto de 2019 por el entonces juez federal de Dolores Alejo Ramos Padilla por el presunto intento de extorsión contra un ex secretario de Cristina Kirchner.
"Ayer, cerca de las 19.30 horas los vecinos del edificio de Liñani llamaron al 911 y denunciaron que un fuerte olor a gas emanaba de su departamento", indicaron desde la fiscalía, que todavía se espera los resultados de la autopsia y peritajes para determinar la causa del deceso.
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Sin embargo, fuentes judiciales estiman que la muerte se produjo por inhalación de gas, luego de que cerca de las 20 horas del pasado martes personal de la Comisaría Vecinal 14 B y del Cuerpo de Bomberos de la Policía de la Ciudad irrumpieran en el domicilio tras las denuncias de los vecinos. Luego de evacuar al edificio, encontraron el cuerpo del hombre de 48 años tendido en el living.
Además, la policía encontró al lado del cuerpo "una manguera plástica que, en un extremo estaba conectada a un caño de gas flexible de la cocina y en el otro una mascarilla de goma", y cartas que había escrito el hombre a sus allegados.
Además, constataron que las puertas y ventanas estaban cerradas desde adentro de la vivienda, que la cerradura no estaba forzada y que el cuerpo del hombre no presentaba signos de violencia, indicios de un probable suicidio.
Enteradas del episodio, concurrieron al departamento la ex esposa de Liñani y madre de sus hijos, de quien estaba separado, y también su última pareja, con quien también había interrumpido el vínculo.
El rol de Carlos Alberto Liñani en el caso D’Alessio
Carlos Alberto Liñani estaba imputado por su supuesta intervención en el caso D'Alessio, en un intento de convertir en arrepentido a Pablo Barreiro, hijo de Ricardo Barreiro, conocido como "el jardinero K", a partir de una maniobra para "quebrar" a Barreiro para que involucrara a la actual vicepresidenta Cristina Kirchner en hechos de corrupción, con el fin de simular su inminente detención.
Barreiro a su vez declaró que fue "apretado" por Claudio Bonadio, Carlos Stornelli y Marcelo D’Alessio en la causa de los cuadernos. Se refirió a la detención de su padre Ricardo, conocido como el "jardinero K", y al momento en que buscaron persuadirlo para que hable como arrepentido.
En ese contexto, Carlos Liñani le advirtió que su aprehensión era algo inminente porque, según su relato, estaba "hasta las manos" y le dijo: "No te da el blanco. Van por vos. Bonadío y Stornelli van por vos. Ya lo fueron por tu viejo y están recalientes con vos y con tu viejo", contó Barreiro a fines del 2020.
El procesamiento de Liñani había sido confirmado por la Cámara Federal de Mar del Plata, por lo que estaba -al igual que otros imputados- camino al juicio oral y público, aunque su parte del expediente todavía no había sido elevada a debate.
cd / ds
