Los investigadores de la masacre de tres policías en La Plata tienen los patrones genéticos de dos de los asesinos, mientras que el principal sospechoso del caso, Leandro Colucci, volvió a negarse a un cotejo de ADN y pidió la nulidad de las pericias.
Fuentes de la investigación informaron además hoy a la agencia ofical Télam que el ADN de otro de los sospechosos, Gustavo Mastrovitto, quien sí accedió en su momento a comparar su sangre, no coincide con los patrones genéticos de los asesinos encontrados en la planta de transmisión del Ministerio de Seguridad bonaerense en La Plata, donde se registró el triple crimen.
Según las fuentes, son 10 los patrones genéticos que los expertos de la Policía Científica lograron obtener de todas las muestras recogidas en la causa.
De esos ADN, cinco fueron obtenidos en la escena del crimen y otros cinco en los distintos allanamientos realizados en el marco de la causa en los domicilios de los sospechosos.
Un investigador explicó que lo más relevante es que de los ADN de la escena del crimen, tres pertenecen a las víctimas, el teniente Pedro Díaz y los subtenientes Alejandro Vatalaro y Ricardo Torres Barboza, pero que los otros dos "inequívocamente son de dos de los asesinos que llegaron a ser heridos por los policías durante el ataque".
Uno de esos perfiles genéticos se obtuvo de un mechón de pelo que Vatalaro le arrancó a uno de sus asesinos en una lucha cuerpo a cuerpo antes de ser asesinado.
Ese mismo perfil genético además coincide con el de unas pequeñas manchas de sangre encontradas en la ropa de otras de las víctimas, el sargento Díaz.
El ADN del otro asesino, en tanto, también se consiguió a partir de una muestra de sangre encontrada en el lugar del hecho que no coincide con el ADN de las víctimas y el obtenido en los pelos y la ropa de Díaz.
A partir de estos resultados, la fiscal de la causa, Leyla Aguilar, le informó al defensor de Colucci, Flavio Gliemmo, que ya estaban los resultados de los ADN y que ahora su cliente podía someterse voluntariamente a la extracción de sangre, como había requerido.
Colucci puso como exigencia, para evitar suspicacias, que antes de extraerse sangre estuvieran listos los perfiles genéticos encontrados en la escena del crimen.
Pero ahora Colucci volvió a negarse a la extracción de sangre y pidió la nulidad de los ADN obtenidos por la policía bonaerense.
"Colucci no tiene problemas en sacarse sangre, pero no de esta manera. Primero porque no nos permitieron tener un control sobre la obtención de estos perfiles genéticos con un perito de parte y segundo, porque queremos que los estudios se realicen en la Asesoría Pericial que depende de la Suprema Corte bonaerense y no en los laboratorios de la Policía Científica", dijo a la agencia oficial Télam Gliemmo.
Uno de los investigadores de la causa aseguró que "la estrategia de la defensa de Colucci es que estos estudios mediante los cuales se obtuvieron dos patrones genéticos de los asesinos queden nulos porque saben que las muestras son escasas y que probablemente no resistan un nuevo estudio".
Quien sí salió favorecido por estas pericias fue Mastrovitto, un hincha de Estudiantes que fue imputado en la causa y al igual que Colucci, estuvo unos días preso como sospechoso porque, en su caso tenía una herida de bala en una mano.
El hincha de Estudiantes, quien siempre aseguró ser un "perejil" en la causa, sí se sometió a la extracción de sangre en forma voluntaria y su ADN no coincide con ninguno de los dos perfiles genéticos sospechosos encontrados en la escena del crimen.
Mastrovitto siempre dijo que la herida de bala que tenía en la mano era de un calibre 22 y que la sufrió durante un asalto.
El triple crimen fue cometido el 19 de octubre último cuando los policías se hallaban custodiando la planta de transmisión del Ministerio de Seguridad provincial, en la localidad platense de Arana, y fueron asesinados a cuchillazos y balazos.
Los pesquisas creen en el móvil pasional que involucra a Colucci y que los homicidas fueron a matar a Vatalaro porque éste salía con la ex novia del sospechoso, Noelia D'Eramo, pero asesinaron también a los otros dos porque salieron en su defensa.
Sin embargo, la oficial de policía D'Eramo aclaró que ella no lo cree a Colucci capaz de haber matado ni haber enviado a matar.
Fuente: Télam