El juicio por el crimen de María Marta García Belsunce tendrá la semana próxima tres audiencias clave por las que desfilarán las personas que tuvieron acceso a la escena del crimen, vieron el cadáver de la víctima en su casa del country Carmel y tomaron contacto con su esposo, el imputado Carlos Carrascosa.
El juicio se reanudará el próximo martes a las 10:00 en los tribunales de San Isidro, sitos en Ituzaingo 340. La décimo sexta jornada se iniciará con la declaración de cuatro operadores telefónicos de las empresas OSDE y Paramedic, quienes atendieron el llamado de Carrascosa solicitando una ambulancia para su mujer a las 19.07 del 27 de octubre de 2002 y despacharon la primera ambulancia, la del médico Juan Ramón Gauvry Gordon, uno de los imputados por encubrimiento.
Esos testigos -que habían quedado pendientes del jueves pasado, son Fernando Barese, Víctor Siwulec, Alicia Rolero y Guillermo Piermattei, éste último quien en las escuchas ya reproducidas en el debate es quien pregunta "¨la cagaron a palos?", en referencia al estado en que encontraron a María Marta.
También pendientes de la última jornada, deberán presentarse Sandra Fabiani, secretaria del ex gerente y encargado del área de seguridad del Carmel, Julio Terán, y Eduardo Canedi, jefe de los vigiladores del country y perteneciente a la empresa "Cazadores".
A partir de allí y siguiendo el orden cronológico establecido por el fiscal Diego Molina Pico para sus citaciones, se espera la declaración de una serie de testigos clave relacionados al momento del hallazgo del cadáver de María Marta.
El más esperado de todos es Santiago Biasi, el médico de la empresa Emernort que fue el segundo en llegar a asistir a la víctima y quien le hizo reorientar la investigación al fiscal hacia un homicidio.
Es que fue Biasi quien al declarar ante Molina Pico, le contó que pudo introducir la primera falange de un dedo en los orificios que la socióloga tenía en la cabeza y que esas lesiones no se correspondían con un golpe contra la grifería de la bañadera.
Biasi también dijo que le recomendó al primer médico, Gauvry Gordon, que llame a la policía y que él avisó por radio que se trataba de una muerte violenta de la que había que dar parte a las autoridades.
Además del testimonio de Biasi, se esperan el del conductor de la ambulancia, Antonio Cachi, y el del chofer de Gauvry Gordon, Walter Beltrán.
Otro de los primeros testigos en llegar a la casa que podrían declarar esta semana es el vigilador José Ortiz, que fue quien estuvo tocando timbre en la entrada hasta la llegada de Carrascosa para poder autorizar el ingreso al country de la masajista Beatriz Michelini.
Ortiz -que fue una de las personas a quienes los análisis de ADN le dieron negativo respecto a la sangre encontrada en la casa-, es un testigo importante para la hipótesis de un homicidio en ocasión de robo de la defensa.
Es que este vigilador reconoció públicamente que "robaba para comer" y los abogados del viudo sospechan que integraba una banda de ladrones liderada por su principal sospechoso, el vecino Nicolás Pachelo.
El estudiante de medicina Diego Piazza, quien además vio el partido River-Boca junto a Carrascosa y su cuñado Guillermo Bártoli poco antes del crimen, será otro de los principales testigos de la semana, ya que fue uno de los primeros en llegar a la casa e intentar reanimar a María Marta junto a la masajista Michelini.
Todas son declaraciones importantes para el fiscal Molina Pico, que la semana pasada tuvo sus primeros logros en el debate cuando varios testigos complicaron la coartada del viudo respecto de que en el horario del crimen estaba en la casa de su cuñado Bártoli.
La mucama de Bártoli dijo que allí no lo vio y la concesionaria y dos de los empleados del club house del country aseguraron que estuvo allí tomando un café y un "lemoncello".
Molina Pico cree que Carrascosa se hizo ver en el club house para tener una coartada, pero después no la pudo utilizar para encubrir a algún familiar.
Fuente: Télam