Una madre adolescente de 17 años murió esta noche de un disparo en el abdomen, al quedar en medio de un enfrentamiento entre un agente de la Policía Federal y un delincuente que escapaba tras robar en un kiosco en el barrio porteño de Flores.
Fuentes policiales informaron a DyN que la chica murió en el hospital Piñero de esta capital, adonde había sido llevada gravemente herida, y que el delincuente, de unos 40 años, quedó internado y detenido en el mismo centro asistencial con un balazo en una pierna y otro en el cuello.
El hecho se registró alrededor de las 18,30, cuando un ladrón entró a robar a un kiosco situado sobre Varela al 300, de donde huyó llevándose el dinero de la caja. Cuando el asaltante escapaba fue visto por un agente de la comisaría 38 de la Federal que realizaba tareas de vigilancia en la cuadra, quien le dio la voz de alto, pero el ladrón abrió fuego contra el uniformado.
El asaltante escapó a la carrera y tomó por la calle Pedernera al 200, seguido por el policía, mientras continuaban los disparos.
En el medio de la balacera uno de los proyectiles impactó en el abdomen de una chica de 17 años, madre de un bebé de un año y medio, vecina de Pedernera al 300 que regresaba a su casa.
La joven fue llevada de urgencia al hospital Piñero pero a raíz de las heridas recibidas falleció. Las primeras pericias indicarían que el disparo que culminó con la vida de la joven inocente habría partido del arma del ladrón, ya que la víctima circulaba detrás del efectivo, según las fuentes. No obstante, se aguardan los resultados de las pericias de balística que la Gendarmería Nacional realizó en el lugar.
Fuente: DYN
