El juez Javier Ríos procesó hoy al portero Jorge Mangeri por femicidio criminis causa y abuso sexual, a 48 horas de haberlo indagado por esta nueva imputación en su contra que agrava su situación en el caso Ángeles Rawson.
El magistrado adecuó el procesamiento a las nuevas imputaciones: abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa agravado en concurso real, con el delito de femicidio también agravado por haber sido cometido criminis causae, es decir, para encubrir otro delito, según se informó esta noche.
Había sido la querella, encabezada por el abogado Pablo Lanusse, la que insistió en que se avanzara en la hipótesis de un ataque sexual no concretado, pese a que la autopsia había dicho que ese intento de abuso no existió.
Hubo una exhumación del cadáver y dos juntas médicas en donde se estableció que la menor había sido víctima de un ataque sexual, al que se resistió con sus uñas y murió estrangulada luchando con su atacante. La defensa había intentado impugnar los análisis de ADN que determinaban que los rastros genéticos bajo las uñas de Angeles eran de Mangeri, pero la Cámara del Crimen rechazó esa pretensión el pasado lunes e inmediatamente el juez Ríos convocó a una indagatoria al portero para el miércoles.
Allí el acusado insistió en declararse inocente, pero el juez Ríos dictó el procesamiento de Mangeri por femicidio agravado. "Esto es una vergüenza, gran escándalo, lo llevan y lo planchan en 48 horas, nunca ví nada igual. Mas allá del propio JM, esto perdió toda seriedad", escribió a las 18.30 en su cuenta de twitter el abogado Miguel Angel Pierri, defensor de Mangeri, al sostener que "esto está más que direccionado", y preguntarse si había otro juez.
La defensa tiene la oportunidad de apelar ante la Sala VI de la Cámara del Crimen, pero el fiscal Ricardo Sáenz opinó que el caso podría llegar a juicio oral el año próximo, y confirmó que los delitos por los que fue procesado implican la pena de prisión perpetua.
La decisión del procesamiento de Mangeri se conoció esta noche, luego de que por la mañana trascendiera la descripción que había dado el juez Ríos de los hechos al indagar a Mangeri.
En esa descripción, el juez imputó formalmente al portero por "haber abusado sexualmente de la menor Angeles Rawson con el propósito de accederla carnalmente", y luego la sometió a "una golpiza destinada a vencer su resistencia" a ser violada, según indicaron fuentes judiciales.
El hombre actuó sobre Angeles "por su condición de mujer, aprovechándose asimismo de la edad de la niña (16 años) y de la superioridad física, mediando violencia de género", según quedó reflejado en la imputación que leyó el juez Ríos el miércoles, cuando le amplió la declaración indagatoria.
Según la descripción a la que tuvo acceso DyN, Mangeri, "con una mano le comprimió el cuello -dejando improntas equimóticas en la zona-, y con la otra la sofocó, obstruyendo los orificios nasales y la boca, manteniendo este mecanismo de asfixia mixta hasta que la niña perdió la vida".
En ese contexto, la reformulación de la imputación, que se orienta al delito de homicidio agravado por femicidio agravado y por criminis causa, explica que Angeles, "a fin de evitar ser accedida carnalmente, se protegió su zona genital con ambas manos.
"El compareciente (Mangeri), en su intento de penetrarla, trató violentamente de quitarlas de allí, lo que le provocó a la damnificada lesiones en el dorso de ambas manos", describe la documentación.
Entre los elementos de cargo contra Mangeri, el juez confirmó lo que había adelantado esta agencia: hay ADN del portero "en los dedos índice, anular y mayor" de Angeles, pero también en la soga con la que fueron atados sus tobillos.
En esa soga -añadió Ríos- "quedaron rastros genéticos del compareciente y se halló, además, un cabello de características morfológicas similares al suyo".