La Justicia liberó a uno de los ex integrantes de Callejeros, condenado y apresado por la tragedia de Cromañón, ocurrida el 30 de diciembre de 2004. Se trata de Daniel Horacio Cardell, escenógrafo de la banda, sentenciado a tres años de prisión.
Cardell dejó el penal de Ezeiza –donde estaba alojado– varias horas antes de la fuga de trece internos que precipitó la renuncia del jefe del Servicio Penitenciario Federal, Víctor Hortel.
El escenógrafo había sido condenado por el delito de “incendio culposo seguido de muerte y cohecho” por el siniestro en el que murieron 194 personas.
El Tribunal Oral Criminal Nº 24 concedió la libertad condicional solicitada por los abogados de la banda, Marcelo Brito y Nicolás D’Albora, el 7 de agosto pasado. Al igual que los otros integrantes de Callejeros, la condena de Cardell no está firme. Y, si bien cumplió dos tercios de la pena (ocho meses) que le permitió acceder al beneficio, el Servicio Penitenciario Federal no pudo fijar concepto en prisión debido a su calidad de procesado. En cambio, su conducta fue calificada como “ejemplar”. “Para poder concederle la libertad, el Tribunal debió darle tratamiento de condenado y en la sentencia los jueces aclaran que ellos no fueron los que ordenaron la detención inmediata, sino la Cámara de Casación, pese a que la condena no estaba firme”, explicó D’Albora a PERFIL.
“La situación es muy difícil para ellos. Cardell está contento por haber salido pero padeció el ambiente carcelario y no está bien de ánimo. Todavía está desorientado”, detalló su abogado.
Chabán se encuentra grave
Omar Chabán, condenado por el incendio de Cromañón, se encuentra internado en el Hospital Santojanni por un linfoma de Hodgkin en un grado avanzado y tiene “un 40% de esperanza de vida”, por lo que su abogado podrían pedir el arresto domiciliario.
“Chabán fue mal diagnosticado de tuberculosis, desde hace ocho meses que tiene fiebre alta y otros síntomas y recién ahora se dan cienta que padece cáncer. Lo tiene en grado cuatro con un 40% de esperanza de sobrevida”, indicó el abogado Víctor Dáttoli. .
El ex gerenciador, “ya había perdido 17 kilos y con este proceso perdió otros diez. Creemos que si mejora estamos en condiciones de pedir arresto domiciliario, porque se trata de un enfermo terminal. Hay que sacarle la custodia en el hospital”, dijo el defensor.
