El fiscal Santiago Garay imputó este lunes al novio de Micaela Blasco, la chica que apareció el miércoles pasado muerta en la bañera de su departamento en la ciudad de Mendoza, por el delito de “homicidio simple”.
Sebastián Videla, de 32 años, después de que se encontraran sus huellas dactilares en el departamento de Micaela y un llavero de la víctima en su poder.
Además, fuentes dijeron que Videla le había comentado a su ex mujer que había encontrado el teléfono celular de Blasco tirado en una plazoleta cercana al lugar del crimen, pero la policía encontró el teléfono en el lugar aportado por los testigos.
Micaela murió asfixiada por inmersión después de haber sido estrangulada con el cable de un teléfono, según se desprendió de la autopsia. Roberto Blasco, padre de la joven de 20 años, explicó: "Esta persona ha estado en todo momento junto a nosotros, desde el momento de la tragedia en calle San Juan".