Un policía federal de 55 años fue herido hoy de un balazo tras forcejear con el delincuente que quiso asaltarlo, luego de que retirara dinero de una entidad bancaria del barrio porteño de Almagro, informaron fuentes policiales.
La tentativa de asalto ocurrió al medio día en la calle Yatay al 100, entre avenida Rivadavia y pasaje Lezica, a unas cuatro cuadras del banco donde la víctima había retirado 3.000 pesos.
El policía es un suboficial escribiente "convocado", tal como denomina la Policía Federal al personal que se retira de la institución y luego es llamado a tomar servicio nuevamente.
El suboficial "iba vestido de civil y nada en su apariencia podía hacer suponer que era policía", dijo a la agencia Télam el vocero de la comisaría 11, que interviene en la investigación del hecho.
El federal -su nombre no fue proporcionado- había retirado el dinero en efectivo de la sucursal Parque Centenario del Banco Patagonia, en la avenida Díaz Vélez 4363, de donde salió caminando con un maletín y tomó por Yatay.
Cuando iba a llegar a Rivadavia, un asaltante, de a pie, se le apareció por detrás, le colocó un arma a la altura de la cintura y lo conminó a entregarle el dinero retirado.
El suboficial, que iba armado, no extrajo su arma reglamentaria, sino que que forcejeó con el ladrón con el propósito de arrebatarle el revólver.
Durante esa lucha, el delincuente efectuó el disparo y el balazo le ingresó al suboficial escribiente por la ingle, provocándole una abundante hemorragia, pero no se desmayó.
El asalto fue visto por un albañil, que estaba trabajando en los pisos altos de una obra en construcción, quien comenzó a gritarle al ladrón, al mismo tiempo que pedía auxilio para la víctima.
La acción de trabajador fue determinante para que el asaltante desistiera de su propósito y comenzara a correr hacia avenida Rivadavia, dijo la fuente.
Unos metros más adelante, un cómplice al comando de una moto de alta cilindrada, con el motor en marcha, hizo subir al rodado al fugitivo y ambos huyeron.
Personal de la comisaría 11, que llegó en un patrullero, convocó una ambulancia y así el suboficial fue trasladado al hospital policial Churruca-Visca, en el barrio de Parque de los Patricios.
Allí fue intervenido quirúrgicamente para extraer la bala de calibre 22 larga y suturarle la herida.
"Afortunadamente el proyectil no tuvo trayectoria ni le interesó ningún órgano vital", dijo el vocero de la comisaría 11 al hacer referencia a la característica de las balas calibre 22.
Ese tipo de proyectil suele provocar mucho daño al hacer largos recorridos dentro del cuerpo en que penetran, cortando arterias, rebotando en zonas óseas y lastimando a su paso órganos vitales.
La víctima quedó internada "fuera de peligro", pero en "observación", como se recomienda en las heridas de bala, que suelen provocar infecciones internas, explicó a Télam la fuente.-
Fuente: DyN
