En el último año el valor del paco se incrementó. En 2011 se podía conseguir a unos cinco pesos, mientras que en la actualidad una dosis oscila entre los diez y veinte pesos. El incremento responde a las reglas del mercado: aumentó el consumo y disminuyó la oferta.
Ignacio O´Donnell, subsecretario de Sedronar indicó a PERFIL que “se detectó un aumento en el consumo, y el fuerte control de la venta que se implementó hace que el precio se eleve”. De 2004 a 2010 el consumo aumentó de 0,2 a 0,5 por ciento entre la población joven, y en estudiantes de nivel medio, de 0,5 al 1 por ciento al 2011.
La fuerte presencia de fuerzas de seguridad en las villas se convirtieron en un escollo para los dealers. “Hay un mayor control porque se pretende reducir la venta”, apunta O´Donnell. Otro aspecto que puede incidir es el aumento de los precursores químicos utilizados en el proceso.