El abogado y empresario Víctor Stinfale quedó detenido en el marco de la causa de la fiesta Time Warp, donde murieron cinco jóvenes por el consumo de drogas sintéticas. Hábil, extrovertido y respetado por sus colegas, Stinfale no logró desplegar con eficacia sus técnicas de defensa, las mismas que utilizó cientos de veces para sacar de la cárcel a varios pesos pesados.
El pasado de Stinfale lo posiciona como un abogado todo terreno. Representó a piratas del asfalto, estuvo ligado a temas legales con el entorno de Pablo Escobar Gaviria y representó y sacó de la cárcel a Carlos Telleldín, imputado en la causa AMIA, y al traficante de armas Monzer al-Kassar.
Acompañó a Moria Casán en las idas y vueltas que tuvo durante su detención en Paraguay y tiene como cliente a Diego Maradona como cuando el exfutbolista solicitó la cautelar contra Veronica Ojeda para que ella no pueda mostrar al hijo de ambos en el programa de Susana Giménez.
En el ambiente del fútbol, fue abogado de Pablo Migliore, de José Barrita (“El Abuelo”, ex jefe de la barra brava de Boca) y de William Schlenker (barra de River, condenado por el asesinato de Gonzalo Acro). Como si fuera poco, dentro del mundo del espectáculo también se puede sumar a Ricardo Fort, Anibal Pachano, Monica Farro y Hernán Piquín.
“No me importa lo que hicieron. No necesito explicaciones, sino una historia que cierre. En Derecho hay que saber mentir, como en la vida. El abogado es el que pone la letra y la música. También depende del dinero que haya. Todos trabajamos por plata”, había confesado Stinfale en 2008 al diario Crítica. Tal afirmación no sorprende al escucharse de la boca del mismo hombre que, tiempo atrás, también aseguró que por un millón de dólares sería capaz de defender hasta a Adolf Hitler.
Sin embargo, desde que se convirtió en gerenciador del Club Deportivo Riestra, dejó su faceta de abogado en un segundo plano y se dedicó a sumar emprendimientos como empresario, hasta convertirse en el presunto dueño de hecho de la marca de bebida de energizantes Speed y de un boliche en Pinamar.
Según varias testimoniales en la causa, desde hace mas de doce años, Stinfale está a cargo del funcionamiento de Energy Group, pero no aparece en los papeles por estar embargado en una causa judicial relacionada con la AMIA desde 2006.
Tragedia de Time Warp. El juez Sebastian Casanello determinó detener a Víctor Stinfale tras presentarse ante la Justicia tras considerar que fue una pieza clave de la organización a través de un entramado de empresas, como Energy Group, que comercializa el agua Block y Speed que se vendían en la Time Warp.
Para el fiscal Federico Delgado, la noche de las muertes, "Stinfale estuvo materialmente presente y condujo la dinámica de los hechos". Además, reveló dentro de las 16 páginas del pedido de prisión, la existencia de un grupo de Whatsapp llamado "Time Warp" donde existía un fluido intercambio de información entre sus participantes mientras se desarrollaba la fiesta electrónica.
Según se especifica, dentro del grupo "participó el abonado 11-3210-1137 del chat. El dueño del teléfono la identificó como 'Erica Víctor'", en referencia a Erica Troilo, la secretaria de Stinfale en Energy Group.
"Erica Troilo fue una prolongación de la voluntad de Stinfale que estuvo en la fiesta. Fue su cuerpo el que estuvo presente en Costa Salguero, pero su cuerpo fue hablado por su jefe Víctor Stinfale. A través de ella él fue informado en vivo y en directo. Por ejemplo, acerca de la cantidad de personas que había en el predio", explicó Delgado.
Además del grupo de Whats App, los organizadores realizaron una cadena de mails donde se envió el "Protocolo de comunicaciones en Time Warp" y del que participaron Troilo, Adrián Conci, Facundo Gonzalez, Walter Santangelo y Maximiliano Ávila.