Un joven tomó esta noche como rehenes a una mujer y a sus hijos cuando entró a una casa de un edificio de monoblocks de la localidad bonaerense de Ciudad Evita para refugiarse de la policía que había querido detenerlo.
Si bien el joven aseguró a la prensa que es "un pibito de 17", fuentes policiales afirmaron que tiene 19 años, se llamaría Nicolás, apodado "Chaki", y estaría imputado por tres homicidios, uno de ellos ocurrido hace dos semanas. Incluso dejó en claro que era devoto de "San la Muerte" y que no tenía miedo a morir.
De acuerdo a los voceros, la policía fue a detenerlo junto a dos cómplices, pero en medio de un tiroteo el joven alcanzo a escapar y se atrincheró en un barrio de monoblocks en las calles 315 y 302, de Ciudad Evita, partido de La Matanza.
Mientras duraba la toma de rehenes, llamó por teléfono a C5N y pidió hablar con los periodistas que estaban al aire, con el fin de obtener garantías para que no lo asesinaran, según difundió ese medio periodístico.
"Que me den garantías. Tengo granadas. Si no, somos todos boleta acá", afirmó el delincuente, que se describió como "un pibito, de 17 años". Incluso, pidió un remedio para la presión que necesitaba la mujer porque -dijo- "quiero tener a mis rehenes bien". En la puerta lo esperaba un fiscal de La Matanza que había ordenado su detención y también su colega que estaba de turno.
Este es el dialogo que mantuvo con el canal:
-"Que me den garantías, si no somos todos boleta"
-"Soy Pablo Kablan de C5N y acá está Eduardo Feimann"
-"La gente de acá está bien, yo no lastimo a la gente. Soy un pibito, tengo 17 años. Yo lastimo a la gente que lastima a toda la gente".
En ese momento gritó "estoy hablando con el canal, esperá", porque posiblemente le estaban tocando la puerta para comenzar la negociación.
-"Cuanta gente hay de rehén, Nicolás?"
-"Tres"
-"¿Hay una señora y dos nenes? Tranquilo, te estamos escuchando todos
-"La gente está bien, está acá, por eso les pido que no hagan matar a gente. Si me quieren matar a mí, vamos y vamos. Millán está al lado mío".
-"¿Quién es Millán?"
-"San La Muerte"
-"Quedate tranquilo. ¿Qué es lo que pedís?"
-"Acá tengo un rehén que necesita tomar medicamentos. Atenolol, 25 gramos, para la presión. Necesito eso. Quiero tener los rehenes bien".
El periodista quiso confirmar el nombre del medicamento y el delincuente le pasó el teléfono a la mujer para que lo repitiera. Cuando quisieron hablar con la mujer, enseguida el joven recuperó el celular tipo Nextel desde el que hablaba y dijo:
-"Yo lo único que pido es el medicamento, las cámaras y que me den las garantías de que puedo salir ileso. Si no, bueno, que Dios se apiade de todos".
Fuente: DyN.