Cuatro presos escaparon anoche de la Dirección General de Investigaciones de la Policía de Tucumán a través de un boquete en la pared que hicieron con tenedores y cucharas.
Los presos, tres de ellos detenidos por robo agravado y el otro por homicidio, estaban alojados en la Brigada cuando los policías descubrieron anoche que se habían fugado.
A las 21 se transmitió el aviso todas las reparticiones para buscar a los prófugos, que a través del boquete salieron hacia el edificio del Ministerio de Educación provincial, en la misma manzana, informó el diario local La Gaceta.
La insólita fuga forma parte de una ola de fugas que viene sucediéndose desde hace tres semanas. Primero fue la escandalosa huida de 13 peligrosos internos del penal de máxima seguridad de Ezeiza, perteneciente al Servicio Penitenciario Federal (SPF), registrada el 19 de agosto pasado a la noche, seis de los cuales ya fueron recapturados. Esto motivó la salida del jefe del SPF, Víctor Hortel, quien fue reemplazado por Alejandro Marambio.
Cuatro días más tarde se escaparon otros dos presos de la Unidad Penal (UP) 5 de Mercedes y el sábado pasado se escapó un recluso de la cárcel de Gorina, en La Plata, tras treparse al alambrado perimetral y saltar a la calle.
Hace dos días seis delincuentes huyeron de la Comisaría 1ª de la localidad bonaerense de Moreno, tras limar los barrotes de una celda y hacer una excavación debajo de la medianera para salir por un local comercial lindero.
En total, unos 25 presos se fugaron en solo tres semanas en diferentes lugares del país.