Una serie de audios obtenidos antes de la denuncia contra el abogado Mariano Mera Alba (53), el hijo del ex ministro del de Carlos Menem que fue detenido esta semana luego de permanecer tres años prófugo de la Justicia, podría darle un giro a la investigación.
Los mensajes fueron extraídos del teléfono celular de una de las denunciantes y serán aportados a la Justicia como prueba para sostener la hipótesis de que las causas contra el abogado fueron armadas. Entre otras cosas, revelan el vínculo que existía entre Jessica R., la ex ama de casa del acusado que en noviembre de 2018 denunció a Mera Alba por secuestro y abuso sexual, y Micaela Rodríguez, su ex pareja, quien un año antes lo acusó por violencia de género, lesiones y abuso.
Mera Alba, que era asesor de Gustavo Menéndez en la Municipalidad de Merlo, estuvo prófugo entre el 6 de marzo de 2019 y el 18 de enero pasado, día en el que una comitiva de la Policía Federal Argentina (PFA) logró capturarlo en una zona de quintas del partido bonaerense de Moreno.
Los audios –a los que tuvo acceso PERFIL– sostienen la teoría que plantea la defensa del abogado detenido: que las acusaciones contra Mera Alba “son falsas” y que la denuncia de la ex empleada del acusado fue instigada por su ex pareja a cambio de recibir un beneficio económico.
En uno de los mensajes, Micaela le aconseja a Jessica que declare en contra Mera Alba para también perjudicar a Gustavo Menéndez, por entonces intendente del partido de Merlo. “La causa de mi denuncia –dice Micaela– es muy simple: si vos declarás y decís: ‘Mirá, la cosa es así, el chabón nos obligaba a decir esto, es un violento, me hizo esto a mí’, al toque listo. No te digo que va a ir preso por lo mío nada más porque en este país nadie va preso por una causa de violencia de género, pero claramente la causa va a tomar otro curso y seguramente se defina en poco tiempo. Después sí va ir preso, y no sé de qué se va disfrazar Menéndez también. Seguro va a decir que no sabía, me va a pedir perdón, pero por mí que se vaya a cagar”.
En otro audio, la ex mujer de Mera Alba le recuerda que se están ocupando todo lo posible para ayudarla económicamente y conseguirle una casa. “Se están moviendo por el tema de la vivienda y para conseguir una ayuda económica por el lado de la CTEP (Confederación de Trabajadores de la Economía Popular), pero tratá de ir el lunes. Avisame, es Capital, pero necesito que hables con ella”.
“Si vos querés, está esta chance –agrega–. No es salir perdiendo escapar de la violencia, nunca es salir perdiendo. Como te dije siempre, confiá y entre todas busquemos la mejor solución. Si no sale lo del IVC (Instituto de la Vivienda de la Ciudad), ya buscaremos la manera de encontrar algo, porque va a salir. Nos fuimos a reunir hasta con gente del PRO para solucionar esto, y nos hacen esperar un poco, pero va a salir, quedate tranquila”, le dice.
Jessica, por su parte, reconoce en otro audio cómo tuvo que mentirle al delegado de ATE en el IVC por la casa que le iban a conseguir con un empleo y domicilio falso. “Ni siquiera sabía que tenía que decir que estaba afiliada a ATE. Me preguntaron de dónde era y les dije de acá. Después, otro de los conserjes me pregunta de dónde sos vos. ‘De La Plata’, le digo. Menos mal que no me preguntó de qué parte porque me muero. Tampoco sabía que yo tenía problemas de salud y eso. A ver si meto la pata”.
Para Juan Manuel Casolati, abogado defensor del hijo del ex ministro del Interior, “el armado de esta causa es la muestra más burda y miserable de la corrupción de una parte del Poder Judicial”.
Este jueves, el acusado prestó declaración indagatoria ante el juez en lo Criminal y Correccional Nº 56, Alejandro Litvack. Lo hizo de manera virtual desde la División Prófugos de la Policía Federal Argentina (PFA), donde se encuentra detenido.
En la indagatoria, “negó los hechos” y manifestó que las denuncias en su contra provienen de su “mala relación” con Micaela, su ex pareja y denunciante. Sobre ella, explicó que “como no pudo hacerle daño con falsas denuncias” instigó a Jessica (su ex ama de casa y supuesta víctima de secuestro y abuso) para que lo denunciara a cambio de recibir beneficios económicos.
Jessica, por su parte, ratificó en una entrevista su denuncia y celebró la reciente detención del hijo del fallecido ex ministro del Interior. En declaraciones a Radio con Vos, recordó que soportó “montones de humillaciones, explotación laboral” y que “vivía prácticamente encerrada”. “No tenía llaves del lugar y no podía salir sin permiso”, señaló.
La mujer, que vivía además con sus dos hijas, explicó que una vez realizada la denuncia tuvo que buscar un lugar donde vivir y fue allí cuando un grupo de compañeras feministas la ayudó para alojarse en un refugio de víctimas de violencia de género.
Según la denunciante, su ex empleador la encontró y secuestró. “Me llevó a un lugar donde me torturaron y me extorsionan. Lo que quería es que rectifique la denuncia en el juzgado”, explicó ella.
Urnas contra narcos y cuestiones políticas
Mariano Mera Alba sostiene que detrás de la acusación en su contra también existen intereses políticos. Cuando fue acusado por abuso, secuestro y lesiones, trabajaba como asesor en la Municipalidad de Merlo y había puesto en marcha un plan de lucha contra el narcotráfico que consistía en la instalación de urnas en las iglesias del partido para que anónimos denunciaran a los vendedores de drogas.
Para el abogado detenido, esa decisión molestó e incidió en el supuesto armado de las causas para perjudicarlo, apoyadas por las denuncias de su ex pareja y su ex ama de casa.
Mera Alba es hijo de Julio Mera Figueroa, el ex ministro del Interior en la primera presidencia de Carlos Menem que falleció de un infarto en mayo de 2002, y primo del ex gobernador de Salta Juan Manuel Urtubey y del senador Dalmacio Mera.
El abogado enfrenta un proceso por “abuso sexual, lesiones dolosas leves y privación ilegítima de la libertad”. Una de las causas en las que está acusado llegó a juicio oral y dos de los cuatro acusados fueron condenados a penas de cinco años y seis meses de prisión, mientras que el tercero resultó absuelto.