David Sarría Ortiz (38) era uno de los últimos cabos sueltos de la “Operación Luis XV”, como se conoció al operativo realizado en abril de 2012 que permitió el secuestro de casi 300 kilos de cocaína que estaban ocultos en muebles de estilo. Este empresario colombiano de alto perfil y organizador de fiestas electrónicas, fue detenido esta semana en su país natal por pedido de la Justicia argentina. Lo arrestaron en el Aeropuerto de la ciudad de Cali y enseguida desató una verdadera revolución en la celda que ocupa en la comisaría de Palmira, en el Departamento del Valle del Cauca.
El hombre que para el juez federal argentino Carlos Ferreiro Pella tendría vínculos con Daniel “El Loco” Barrera Barrera, uno de los narcotraficantes más importante del mundo, subió una foto en su cuenta de Facebook en la que aparece sonriente, con el torso desnudo y una copa de ron junto a otros cuatro presidiarios.
Sarría Ortiz explicó su situación a seguidores y amigos: “Por ser amigo de personas que normalmente vivían nuestras fiestas y cultura colombiana, estoy siendo retenido con circular roja por la Interpol y siendo llamado a indagatoria en Argentina”, escribió en su muro pocas horas después de haber sido detenido. En pocos minutos sumó más de 10 mil adhesiones y decenas de comentarios.
Como en las cárceles argentinas, los detenidos tienen prohibido el uso de teléfonos celulares o cámaras de fotos, y el acceso libre a internet. Tampoco está permitido consumir bebidas alcohólicas. Por eso, la actividad en la cuenta de Sarría Ortiz motivó una investigación interna y el traslado de uno de los hombres que aparece en la foto, a quien señalaron como dueño del teléfono que tomó la polémica imagen.
Sobre la foto, el propio empresario explicó que así fue recibido por sus amigos en el calabozo de Palmira: “Con mis nuevos amigos, César Calderón, alias el Indo... Duweiamar Vargas, alias El Temido... Samir López, alias el Caleño, y Freddy Prado alias Le Le... Bueno me han atendido de lujo”. De su inminente viaje a nuestro país para responder la acusación que pesa en su contra indicó que viajará con sus abogados “a explicarles a las autoridades argentinas que ser amigo de mis amigos no es delito”.
Buscado. David Sarría Ortiz está acusado por los delitos de “tráfico de estupefacientes y lavado de activos”, según explicó a la prensa colombiana Fernando Murillo, comandante de la Policía del Valle. “Actualmente le rendía cuentas a Juan Fernando Alvarez Meyendorff, alias ‘Mechas’, quien ya fue extraditado hacia Estados
Unidos”, apuntó.
En Argentina, donde vivió entre los años 2003 y 2008, formó parte de la empresa Forture Lite S A, investigada por “lavado de activos” y vinculada a Barrera Barrera.
En esa compañía el empresario colombiano figura como socio, según fuentes judiciales. Forture Lite funciona en la calle Fraga al 400, en la Ciudad de Buenos Aires.
De acuerdo a los voceros, la empresa en cuestión se dedica a la fabricación, transformación y ensamblaje de equipos de sonido, iluminación, video y efectos especiales, también a la representación comercial. Sarria Ortiz figuraba como director suplente de esta organización y prestaba servicios de asesoramiento, dirección y gestión empresarial.
Además de sus supuestos vínculos con “El Loco” Barrera Barrera y Alvarez Meyendorff, los investigadores recordaron un misterioso ataque que sufrió hace más de diez años: un sicario le pegó seis disparos cuando viajaba en un auto. Estuvo al borde de la muerte. Pero sobrevivió. Al poco tiempo se vino a vivir a nuestro país. En los próximos días regresará, pero en calidad de detenido.
