POLICIA

Video prueba que el padrastro de Ángeles estaba en un banco

Sergio Opatowski aparece cobrando su pensión por viudez en el horario en el que la víctima fue interceptada por quien la asesinó. La defensa en tanto pide anular las pruebas de ADN.

Video aportado por el banco Macro en donde se observa a Opatowski haciendo trámites en el mismo horario del crimen.
| Télam

Sergio "Pato" Opatowski, marido de la madre de Ángeles Rawson, estaba haciendo trámites en un banco a la hora en que la víctima fue registrada entrando al edificio antes del crimen, según las filmaciones de las cámaras de seguridad de una sucursal del banco Macro que fueron brindadas a la causa.

De esta manera, las imágenes permiten ratificar las palabras del padrastro en torno a que no estuvo en el lugar de los hechos.

Fuentes de la investigación explicaron que la presencia en el banco lo aleja a Opatowski unas 55 cuadras de la escena del crimen y confirma su coartada acerca de lo que hizo durante el horario en el que fue cometido. Voceros de la investigación revelaron que el Banco Macro le envió al juez de la causa, Javier Ríos, las constancias de que a las 10 de aquel lunes 10 de junio, Opatowski entró a la sucursal de Sarmiento y Reconquista, y acompañó los videos de las cámaras de seguridad, consignó el portal de Télam.

A las 10.07, -es decir 17 minutos después de que a Angeles se la ve en un video llegar al edificio de Ravignani 2360-, el hombre cobró por ventanilla su pensión por viudez. Si bien nunca declaró en la causa, públicamente Opatowski siempre dijo que aquella mañana desayunó en su casa, se retiró a realizar trámites como el de su pensión en el Banco Macro y cobranzas para la empresa de desinfección en la que trabaja su mujer, María Elena Aduriz, y que recién regresó alrededor de las 14 a Ravignani 2360.

La propia Aduriz también había contado, al declarar como testigo, que su marido Opatowski había ido esa mañana a cobrar la pensión que ella calculó era de alrededor de 4.200 pesos. El informe del banco beneficia la situación de Opatowski, quien aún no fue llamado a declarar por la Justicia y fue investigado como sospechoso al inicio de la investigación, antes de que sea detenido el portero Jorge Mangeri.

El chequeo de esta coartada fue una de las 52 medidas que ordenó esta semana el juez.

En tanto, los abogados del portero Jorge Mangeri pidieron la nulidad de las pruebas clave de ADN que demostraron que la asesinada Ángeles Rawson tenía rastros genéticos del encargado del edificio bajo sus uñas, en un claro intento de defensa, según se determinó en el procesamiento del imputado.

La defensa ya pidió la nulidad de gran parte de lo actuado en la causa por entender que se trató a Mangeri como un sospechoso pero se lo interrogó como testigo hasta que se autoincriminó. Ahora añadió a ese pedido la nulidad de las pericias de ADN por entender que se violó la cadena de custodia cuando se remitieron las muestras al laboratorio.

"Puede haber contaminación claramente y por eso sugiere este resultado. Nosotros como defensores tenemos que resguardar el debido proceso", dijo Biondi al irse de Tribunales. La defensa insistió en que también apuntará a cuestionar la autopsia.

Sin embargo, la familia de la víctima dejó ayer una posición muy clara sobre su rechazo a la nueva jugada: "Ángeles habló en la autopsia a través del ADN de sus uñas y dijo quién fue el agresor. La otra persona (Mangeri) hasta el día de hoy prefirió mantener silencio", dijo el abogado Pablo Lanusse, representante del padre de la víctima.

La querella rechazó formalmente los planteos de nulidad hechos por la defensa de Mangeri, y también lo hizo la fiscal María Paula Asaro, con lo cual el expediente estará pronto a ser elevado a la Cámara del Crimen para que esos jueces revisen las pretensiones de los abogados del portero.