A pocas horas de la reunión con el Presidente de China, el gobierno argentino esperaba la habilitación de la libre disponibilidad de los 5 mil millones de dólares a través de los swaps y el pago de 500 millones de dólares por la construcción de dos represas. Al dejar Indonesia rumbo a Madrid, desde la comitiva oficial explicaron que el envío del dinero sería de manera casi inmediata.
Se trata de los dos compromisos que mostró Xi Jinping en la reunión bilateral con Alberto Fernández. El primero tiene que ver con que nuestro país tendrá libre disponibilidad para usar 5 mil millones de dólares. Hasta ahora, solo se le permitía usar cada 90 días 473 millones de dólares de los 18 mil millones. A partir de ahora, ya tendrá el nuevo monto hasta julio de 2023, que será renovable.
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“Las reservas de libre disponibilidad para el Banco Central pasa de tener 5 mil millones, producto de la recaudación del dólar soja, a 10 mil millones producto de la liberación de parte del swap después del acuerdo con China. Con lo cual tenemos disponible para trabajar en el mercado único libre de cambio 10 mil millones de dólares. Esto, para los sectores productores de la Argentina es muy importante porque le permite acceder más rápido al flujo de dólares para insumos y bienes intermedios importados para la producción primaria en la Argentina”, explicó Sergio Massa en el vuelo ante PERFIL y otros medios que cubren la gira.
El segundo compromiso que el gobierno confía que se materializará en las próximas horas tiene que ver con el pago por las represas Kirchner y Cepernic. Llegarán 500 millones de dólares, de los cuáles 223 son reembolsos que China adeudaba y 277 como anticipo para continuar con las obras. En el encuentro bilateral se comprometieron a enviar 1.223 millones de dólares en total.
Sobre el final de la gira, los funcionarios que viajaron con Fernández también celebraron los avances que consiguieron en la reunión con Kristalina Georgieva. “Lo segundo importante es haber dejado ya abierta la discusión con el FMI respecto del precio de la guerra”, explicó el ministro de Economía.
“Argentina, parte del hemisferio sur, no es ajena a esa enorme tensión que vivimos. En lo que va del año, esta guerra le costó a mi país casi 5 mil millones de dólares ¿Quién reparará semejante prejuicio”, decía el discurso que preparó Alberto Fernández para la primera sesión del G20 y terminó leyendo el canciller Santiago Cafiero luego de la descompensación que sufrió el Presidente.
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En la comitiva celebraban que Georgieva haya aceptado abrir la discusión que evalúan será después del cierre del tercer trimestre y cuando se debata la prospectiva 2023. Hay una diferencia con la que se sentarán a la mesa: el organismo internacional dice que el costo fue 3.400 millones de dólares y no 5 mil como dice Argentina. En el gobierno explican la diferencia en la adjudicación a Martín Guzmán por el incumplimiento en la aplicación de la eliminación de los subsidios.
Sobre los sobrecargos que nuestro país viene reclamando, la directora del organismo aseguró que se empezarán a discutir en el board del FMI. “Argentina le está pagando al FMI el doble de tasa de interés que por ejemplo le paga al BID y eso resulta absurdo cuando el prestamista de última instancia es el FMI”, dijo Massa. Para el 2023, el Fondo cobrará 6,6% de interés, contra el 5% del Banco mundial, el 2,9% del BID.
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