Detenidos por casos de narcotráfico, trata de personas, delitos de lesa humanidad y corrupción, son solo algunos de los que presentaron sus pedidos de excarcelaciones o arrestos domiciliarios en los últimos días. La “lluvia” de pedidos tuvo al coronavirus como justificación. Desde el represor Alfredo Astiz pasando por varios de los condenados de la Tragedia de Once, hasta acusados de corrupción como Lázaro Báez o Amado Boudou son sólo algunos de los que lo hicieron.
Los pedidos, presentados de a decenas en los diferentes tribunales, deben ser respondidos en los próximos días y suponen una dinámica absolutamente nueva en la justicia, que se enfrenta por primera vez a una situación de cuarentena. El último registro de una feria extraordinaria dictada por motivos de salud fue en 2009, con la gripe aviar, pero lo acontecido actualmente supera ese escenario.
Durante la jornada de ayer, el Tribunal Oral Federal (TOF) 4 rechazó conceder la prisión domiciliaria a Báez, quien había solicitado ese beneficio tras considerarse población de riesgo frente al avance de la pandemia ocasionada a causa del Covid-19.