Argentina y Brasil acordaron realizar tareas conjuntas para la creación de un “anillo cibernético” que proteja de actividades de espionaje sobre sus respectivos sistemas de defensa. El acuerdo se lanzó como respuesta a las tareas de inteligencia que realizaba la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de los Estados Unidos sobre comunicaciones del gobierno de Dilma Rousseff.
El anuncio fue realizado ayer por el ministro de Defensa, Agustín Rossi, y su par de Brasil, Celso Amorim, durante un acto en el Salón San Martín del Edificio Libertador. El próximo encuentro se concretará en no más de dos meses en Brasil, donde se reunirán nuevamente ambos funcionarios con los equipos técnicos para avanzar en lo que por ahora es una simple “declaración” de interés.
Tras la firma del documento, que también contempla otros puntos en materia de cooperación militar, Rossi explicó que la complementación en el área de cibernética es una respuesta a “todo lo que ha ocurrido en los últimos tiempos en América latina con este sistema de espionaje que ha existido, fundamentalmente con epicentro en Brasil”.
Por su parte, Amorim reconoció que en su país están “haciendo un informe muy profundo sobre cómo ampliar y desarrollar más nuestras capacidades” en materia de contrainteligencia informática.
El 1º de septiembre pasado, gracias a los documentos proporcionados por el ex empleado de los servicios de inteligencia de EE.UU. Edward Snowden, un programa del canal de televisión Globo 1 reveló que la NSA habría espiado los contenidos de llamadas telefónicas, correos electrónicos y mensajes de teléfonos móviles de la presidenta brasileña y sus asesores más cercanos.
Este paso “en materia de ciberdefensa”, dijo Rossi durante la conferencia, es una “reacción positiva en este tipo de cuestiones”. El funcionario, que evitó dar demasiadas precisiones, también destacó otros hechos que en los últimos meses fueron atribuidos a acciones de inteligencia organizadas desde el Pentágono: “En América latina han sucedido cosas que a los argentinos no nos gustan”, indicó y se quejó por el “sistema de espionaje”. Además, recordó el reciente conflicto con el presidente de Bolivia: “A Evo Morales le impidieron su circulación por el espacio aéreo de países europeos”.
Antes de la firma del documento, ambos funcionarios hablaron sobre la cooperación en la industria para la Defensa, acciones de coordinación en Emergencias, la situación geopolítica de Sudamérica y sobre políticas de género en las Fuerzas Armadas. Amorim fue galardonado ayer con la condecoración Doctor Mariano Moreno, en orden al mérito extraordinario.