Hermes Binner se mostró ayer “preocupado” por la reacción que tuvo Cristina Kirchner tras el resultado electoral del domingo último y dijo que la Argentina necesita una “persona equilibrada” al frente del Gobierno. Para el ex gobernador santafesino y actual candidato a diputado por Santa Fe, no aceptar una derrota es una cosa, “pero enojarse de la forma en que lo hace es peor”.
En su provincia, Binner obtuvo un rotundo triunfo con más del 40% de los votos y 15 de diferencia sobre el segundo. El kirchnerismo allí quedó tercero detrás del aspirante del PRO, Miguel del Sel.
“Si éste es el camino que hay para los próximos dos años que le queda de mandato, es para preocuparse”, advirtió, en diálogo con la radio La Once Diez. El miércoles, durante un acto en Tecnópolis, Cristina Kirchner pidió debatir “con los titulares” y no con los suplentes que determinados intereses ponen en las listas. Binner dijo en ese sentido que el actual gobernador santafesino, Antonio Bonfatti, desde hace dos años está pidiendo una audiencia con la jefa de Estado, sin resultados. “No nos da ni cinco”, graficó el candidato a diputado nacional. Y agregó que no cree que los partidos sean convocados por CFK para dialogar. Eso sí había ocurrido tras la derrota del kirchnerismo en 2009.
La mandataria hizo, en cambio, una convocatoria a los grandes empresarios y a los sindicalistas para avanzar en una suerte de pacto social. Les pidió, a ellos, debatir sobre cómo distribuir el dinero y sobre un proyecto de país. Empezará con una ronda de charlas el miércoles, en Río Gallegos, adonde fueron convocados distintos sectores de la economía nacional. Otro candidato que cuestionó a la Presidenta fue Ricardo Alfonsín. Tras tildar de reaccionaria a CFK, el integrante del Frente Progresista Cívico y Social, y segundo de Margarita Stolbizer, advirtió que para el oficialismo “el 54% del 2011, más que un resultado electoral, era una prueba inapelable de los aciertos del oficialismo y la incapacidad de la oposición. El resultado electoral sólo es prueba de que el pueblo no es capaz de distinguir entre lo que es bueno y lo que es malo para él”.