En las sombras, y sin hacer olas, la diputada Patricia Bullrich se transformó en una de las personas más escuchadas por Mauricio Macri. De hecho suelen reunirse una vez por semana.
El año pasado comenzaron a forjar una estrecha relación, que se vio plasmada en la lista de legisladores porteños del PRO, donde el principal colaborador de Bullrich, Juan Pablo Arenaza, quedó segundo.
Bullrich ya había colocado a José Luis Patiño como candidato a diputado nacional.
Hoy la diputada de Unión por Todos es parte de la mesa de la campaña. A tal punto que tiene a su cargo, tras las primarias, la zona norte de la Ciudad, donde UNEN realizó una buena elección: se hizo cargo de las comunas 2, 14, 12 y 13, aquellas que corresponden a los barrios más ricos de la Ciudad, a excepción de Puerto Madero.
De buena relación con el jefe de campaña, Horacio Rodríguez Larreta, la Piba ya está sentada en el comité de campaña, da consejos y organiza eventos.
En sus diálogos privados con Macri, Bullrich intenta aportarle una mirada nacional: le repite que debe alejarse de la interna del PJ y que tiene que construir una “tercera vía” con un partido alternativo (el PRO). Y le promete que desde el 29 de octubre estará dedicada a la campaña nacional de Macri presidente.