Los desacuerdos entre funcionarios son habituales. Pero el kilometraje en cero de la gestión de Cambiemos refleja la rareza de la primera visión contrapuesta. El designado secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, tomó distancia de la sentencia de la gobernadora de la Provincia, María Eugenia Vidal, sobre la necesidad de purgas en la Bonaerense.
“En la policía hay mucha gente, la mayoría, que trabaja bien. No estoy de acuerdo con la idea de una purga: hace pensar que está todo podrido, y no es así”, aseguró el futuro secretario, Eugenio Burzaco, desmarcándose de Vidal.
La gobernadora electa de la provincia de Buenos Aires anunció tras las elecciones que no viene “sólo a hacer purgas ni a darle respaldo” a los policías, sino hacer “las dos cosas”. “Ella lo eligió a (Cristian) Ritondo, yo pienso de otra manera. En la Nación no se va a trabajar así”, sentenció en diálogo telefónico, antes de conocerse su designación, con Perfil.com.
De todos modos, Burzaco consideró que las diferencias con su par en la Provincia “no son mayores”, y que la cooperación entre las policías Bonaerense, Federal, y Metropolitana es parte fundamental del proyecto del nuevo gobierno. “Vamos a ir reordenando lentamente el sistema de seguridad interior. La situación actual, con los gendarmes en las ciudades y dos tercios de la Federal operando en la capital no tiene sentido”, analizó.
El exjefe de la Policía Metropolitana no dio detalles sobre la Agencia Federal contra el Narcotráfico anunciada por Mauricio Macri, pero dijo que será “del estilo del FBI”, tal como anticipó diario PERFIL, y que tendrá a su cargo también la lucha contra “el crimen organizado, el lavado de dinero, la trata de personas y el tráfico de armas”.
Burzaco, quien tras revelarse su nombramiento ratificó a Perfil.com sus declaraciones, adelantó también que buscarán un mejor control de las fronteras, a las que describió como “porosas”, y por las que aseguró que pasa “toda clase de contrabando desde cigarrillos hasta armas”.
Finalmente, calificó de “fracaso” la labor del SEDRONAR. “Es un organismo que abarca áreas muy distintas, como la prevención y el tratamiento, y que finalmente no hace nada bien”, explicó.
(*) Especial para Perfil.com, alumno del Posgrado de Periodismo de Investigación de PERFIL-USAL.
