Eduardo Buzzi, una de las caras más representativas de la protesta del campo contra el Gobierno fue entrevistado por Jorge Fontevecchia pocos días antes de los actos de hoy en Rosario y Salta. El ruralista no ve con optimismo el desenlace del conflicto.
—¿Kirchner es setentista con los derechos humanos pero noventista y menemista en lo político y económico?
—Absolutamente aplicable. Alentó el monocultivo sojero al dejar actuar el mercado, reprimieron aquellas cosas que molestaban en el INDEC, como la leche o la carne, y aparece la mayor de las contradicciones. La Presidenta diciendo “este yuyo” y que hay que desalentar la soja, mientras todo el proceso alentó la concentración del monocultivo sojero. Subió a Grobocopatel a un avión y lo mandó a Venezuela como embajador sojero. Una contradicción muy fuerte que, además, está asociada a cuestiones mucho más profundas, como Roberto Urquía, uno de los grandes beneficiarios de la definición del monocultivo sojero de Kirchner que termina siendo uno de sus aliados estratégicos en Córdoba.
—Usted dijo que Grobocopatel representa para la pampa lo mismo que Benetton para Santa Cruz. ¿Qué quiso decir con eso?—El Benetton de Santa Cruz es el modelo productivo exitoso que mejor reconoce el matrimonio Kirchner. Grobocopatel es el modelo productivo exitoso de la pampa húmeda.
—¿Qué elementos comparten?, ¿el latifundio?
—Ambos generan producción, algunos puestos de trabajo, superávit comercial, superávit fiscal, que son las cosas que interesan al modelo kirchnerista. Lo que no le importa es que sea una agricultura sin agricultores con tal de tener superávit fiscal y comercial.
—¿Una mirada cortoplacista?
—Absolutamente. Y además es cómplice de la Aceitera General Deheza o de Bunge, Cargill, Dreyfus, que terminan siendo los grandes beneficiarios de este proceso. Busca el resultado, pero al tener en cuenta sólo la recauda—¿Golpeó cacerolas en diciembre de 2001?
—Estuve en la plaza con Mario Raitieri, presidente de Coninagro.
—¿Qué diría hoy el mítico presidente de la Federación Agraria durante 25 años, Humberto Volando, sobre el conflicto?
—El año pasado, ya se expresaba contra el proceso kirchnerista.
—Ud. dijo: “Menem definió que la Sociedad Rural era el sujeto de la desregulación y la apertura. El problema es que en esta etapa no se define quién es el nuevo sujeto agrario. El Gobierno no niega que sean los fondos de inversión ni tampoco le preocupa que se desplace a los medianos productores y a los productores familiares y se va concentrando la producción en pocas manos”. ¿El Gobierno está a la derecha de su ideología?
—Absolutamente. Una cosa es llamarse gobierno popular y otra son los hechos. En materia económica la definición de sujeto agrario no aparece, aparece en procurar un gran objetivo general, superávit fiscal, superávit comercial, no importa quién produzca, dejándoles que sean los actores más concentrados. El sujeto agrario son los grandes actores, muchas veces de capital financiero que ingresan al negocio de la siembra gestionados por personas muy hábiles, como Grobocopatel.
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