Los exámenes complementarios de la autopsia de Alberto Nisman, que podrían ayudar a determinar cómo ocurrió su muerte (aún caratulada como “dudosa”), deberán esperar unos días más. Si bien la autopsia al cuerpo del titular de la UFI-AMIA ya se realizó, aún restan el examen toxicológico y el histopatológico, que serían claves para determinar si el fiscal se suicidó o fue asesinado.
Los análisis complementarios generan expectativa: especialmente el examen toxicológico, ya que, de encontrarse alguna sustancia, podrían indicar si el fiscal pudo haber actuado contra su voluntad.
Si bien el resultado del estudio, que busca en sangre, orina y visceras rastros de ingesta de alcohol u otras sustancias, debían estar esta semana, la fiscal Viviana Fein, optó por esperar la conclusión del examen histopatológico para incluirlos de forma conjunta en la causa, indicaron fuentes de la causa a Perfil.com.
Peritos consultados por este medio, explicaron que la pericia histopatológica -que tarda unos días más que la toxicológica- analiza los tejidos y se suele utilizar en casos de violación. “Detecta si hay tejidos internos dañados y qué los pudo causar”, indicaron. Este examen también busca detectar signos de disparo próximo, a través del estudio de los tacos de piel del orificio de entrada.
Fein esperará que los forenses y otros técnicos que intervienen en la causa estudien detenidamente los exámenes para dar a conocer las conclusiones que, finalmente, estarían listos la próxima semana para dar a conocer.
(*) De la redacción de PERFIL. Especial para Perfil.com.