El senador kirchnerista Salvador Cabral dijo que la muerte del fiscal Alberto Nisman se trató de "un crimen pasional entre un amor homosexual", donde "el marido, digamos así, que es el flaquito que le llevó la pistola (se refiere a su colaborador Diego Lagomarsino), lo encontró en situaciones amorosas al muerto y le pegó un tiro en la cabeza amorosamente".
Según la teoría del senador por Misiones, esto se deduce por la declaración de la testigo Natalia Fernández que estuvo presente en el departamento de Nisman a la hora del allanamiento de las autoridades. Para Cabral, "es un cadaver que la mafia, los servicios le tiraron al gobierno encabezado por (Antonio) Stiuso. Creyendo que con eso se iba a producir una crisis política de mayor profundidad que no se produjo".
"Ayer declaró una testigo que dijo que se encontró con un ambiente de 'festichola', que el ambiente que ella vio estaban los de servicio para transformarlo en un crimen", argumentó ante la sorpresa de la periodista de Radio República de Misiones que escuchaba atentamente. "Esto va a salir en estos días", aventuró el legislador.
Según Cabral, "Stiuso aprovechó la situación para transformarlo en una figura política. Stiuso no tiene nada que ver, es amigo del que llevaba el revólver. Cuando se encontró con esta situación, él dijo 'señores se va todo el mundo, esto se transforma en un hecho político'".
Por último, Cabral consideró que la marcha de hoy "es una marcha política, la hacen los partidos".
Fe de erratas: En una versión inicial de esta nota se consignaba el nombre del técnico informático Diego Lagomarsino como “Gabriel Lagomarsino”, quien no tiene relación con el caso Nisman. Gabriel Lagomarsino es referente de una fuerza política local llamada "Encuentro Pilarense", precandidato a Intendente de Pilar por el Frente Renovador, coordinador de la ONG ambientalista "S.O.S. Delta", docente y consultor de empresas en las áreas de mejora de procesos y dirección de proyectos.