Cristina Kirchner llegó anoche a Aeroparque y fue recibida por dirigentes y militantes. La fecha de su regreso a Buenos Aires está digitada por la Justicia. Ocurre que deberá presentarse esta semana, posiblemente mañana, en el despacho del juez federal Claudio Bonadio para notificarse en persona de su procesamiento en la causa dólar futuro.
La semana pasada, la defensa de la ex presidenta presentó un recurso de reposición para que ella pudiera hacer el trámite en un juzgado federal de Santa Cruz, pero Bonadio le denegó el pedido y le dio cinco días hábiles para ir a Comodoro Py. El jefe de la bancada K, Héctor Recalde, dijo ayer que Cristina Kirchner está siendo “muy perseguida por Bonadio”.
La última vez que estuvo en ese despacho dio posteriormente un discurso afuera de los tribunales, ante una convocatoria masiva, y lanzó el Frente Ciudadano, un espacio que debía ser integrado por la “resistencia” a Mauricio Macri. Pero la construcción de ese frente avanzó a medias. Hubo algunas incursiones al interior bonaerense por parte del ex ministro y actual diputado Julio De Vido. Pero no mucho más.
La notificación en Comodoro Py y el cumpleaños de su hija Florencia –que es el miércoles– son dos de las razones por las cuales la ex jefa de Estado aterrizó anoche en Buenos Aires. Aunque no las únicas.
Su primera actividad aún no está confirmada. Un rumor indica que podría asistir hoy al programa que Roberto Navarro tiene en C5N. Desde el canal dijeron que la entrevista está pautada desde hace tiempo, pero aclararon que depende de la confirmación de CFK, que no llegará hasta último momento. Otra fuente negó que la ex presidenta se vaya a presentar en el canal de Cristóbal López.
Paso a paso. En el entorno de la ex mandataria aclaran que la agenda para su estancia en Buenos Aires será confeccionada hoy mismo.
Para algunos, se quedará un tiempo largo. Quizás sea una expresión de deseo. Otros desconocen cuánto durará su estadía. “La información es que piensa quedarse un buen tiempo. Y que quiere hacer política”, confió un ex funcionario de su gabinete, muy activo cerca de ella.
CFK llega justo cuando su último reducto de poder, la Cámara de Diputados de la Nación, está a punto de estallar en mil pedazos. El peronismo quiere partir el bloque, que hoy tiene algo más de setenta diputados. Más de treinta son leales a ella, pero quedan cuarenta que podrían repartirse entre un nuevo bloque peronista y el actual bloque justicialista.
A una comitiva de dirigentes del Movimiento Evita, antes de que estallara el caso López, le había dicho que no tenía vocación de conducir y que no apostaba a la unidad. Los planes parecen haber cambiado. En parte, presionada por sus propios seguidores, que le reclaman presencia para evitar la dispersión del kirchnerismo.
También se desató un debate acerca de dónde debería vivir. Algunos le aconsejan que deje Recoleta para irse a City Bell, en La Plata, la ciudad que la vio nacer. Sería un distrito ideal para ella si es que comienza a caminar la provincia de Buenos Aires con fines electorales.
Alicia K, muy complicada
A seis meses del comienzo de su administración, la gobernadora Alicia Kirchner pasa por uno de los momentos más complicados desde que arribó al poder el 10 de diciembre pasado: la oposición cuestionó la trasparencia de su gestión, los gremios le reclamaron la reapertura de paritarias y un juez le trabó un endeudamiento de hasta diez mil millones de pesos sancionado en medio de una caótica sesión legislativa. El magistrado es Francisco Marinkovic, el mismo que el año pasado frenó por un tiempo la ley de lemas.