La exuberante isla caribeña de Santa Lucía se asocia con el lujo desde hace tiempo, gracias a sus hoteles exclusivos y célebres huéspedes, desde Oprah Winfrey hasta Justin Bieber.
Pero incluso los mejores hoteles ofrecen habitaciones de tres paredes (aunque con abundantes mosquiteros). En la dramática región Pitón del extremo sur de la isla, cerca del pueblo de Soufriere, varias propiedades históricas están llevando el concepto terrenal aún más lejos –una combina el turismo con la agricultura y otra tiene un spa abierto en las copas de los árboles en la selva– y hay restaurantes que ofrecen menús “del campo al tenedor’’. Los atractivos naturales son el punto fuerte de Santa Lucía: aguas termales, selvas tropicales, montañas y, por supuesto, el mar.