“Volvimos a un punto muerto”, admite uno de los dirigentes que debía ejercer como interlocutor entre los distintos sectores del Frente de Todos después de la reunión en el Partido Justicialista que parecía darle inicio a la discusión sobre la estrategia electoral. Sin diálogo, quien está dispuesta a pararse en el centro de la escena es Cristina Kirchner y así lo hará.
“No hubo ninguna conversación más”, detalla un funcionario que participó de la reunión en la calle Matheu en la que los principales referentes del oficialismo se reencontraron para comenzar a discutir sobre las candidaturas del espacio. “La reunión del PJ fue dura, cada sector expresó su posición, pero con altura y respeto, sobre todo Máximo Kirchner. Hubo tres posiciones: La de no hacer otra cosa que luchar contra la proscripción de Cristina Kirchner de “El Cuervo” (Andrés Larroque); la de Máximo, Anabel Fernández Sagasti y Eduardo “Wado” De Pedro también planteando la proscripción, pero exigiéndole al Presidente que se defina para armar la estrategia electoral con esa definición (la de bajarse) previo a todo. Y Alberto, diciendo que no iba a definir ahora y que van todos a las PASO”, describe ante PERFIL uno de los participantes del encuentro del 16 de febrero para luego explicar: “Después de eso, salió Larroque nuevamente a putear a Alberto, hubo respuestas públicas de Victoria Tolosa Paz y de Aníbal Fernández y volvimos a punto muerto”.
Sin embargo, el cronograma electoral ya está oficializado y los tiempos comienzan a marcarle el ritmo al Frente de Todos. El espacio deberá avanzar en la constitución de la alianza ya que el 14 de junio vence el plazo para solicitar el reconocimiento de los espacios que participarán de los comicios. Para eso, ya el peronismo debió haber convocado al Consejo Nacional del PJ y éste llamar al Congreso del partido para que apruebe el frente electoral. Parece un trámite senciooo, pero un diputado lanza una pregunta: “¿Partidos que responden al kirchnerismo como puede ser Kolina va a formar parte de la alianza si Alberto Fernández dice que es candidato?”. Por eso, al igual que en 2019, muchos creen que los nombres deben estar definidos para mayo.
Mientras tanto, quienes escucharon a la vicepresidenta en los últimos días aseguran que sus movimientos parecen estar lejos de una de las teorías que circula por varios despachos peronistas y que habla de un refugio del kirchnerismo en el territorio bonaerense ante una derrota nacional. Cristina Kirchner no parece querer perder la elección presidencial y así lo demuestra cuando recibe a dirigentes y habla con gobernadores por teléfono.
Esos diálogos no resuenan en público, pero se dan todas las semanas. Incluso, mientras desde la Casa Rosada dejan ver las disputas que mantienen con algún gobernador como es el caso del santafesino Omar Perotti en plena discusión por el avance del narcotráfico, la vicepresidenta levanta el teléfono y habla con él. Las charlas tienen que ver con los armados provinciales. CFK busca con los gobernadores la mejor estrategia para, primero, ganar sus territorios.
Más tarde vendrá la discusión por la estrategia nacional, pero algunos de ellos no dudaron al momento de sumarse al operativo “Cristina presidenta” que lanzó el kirchnerismo una semana atrás en Avellaneda. Jorge Capitanich (Chaco) y Ricardo Quintela (La Rioja) ya acordaron recibir a la militancia en sus provincias. Allí estarán los dirigentes locales y legisladores nacionales, pero también se espera que sean los gobernadores los que cierren estos encuentros en los que buscan “romper con la proscripción” y que la titular del Senado se presente en las elecciones presidenciales. Allí no llega la disputa entre Máximo Kirchner y los gobernadores como para pelear por el orden de los oradores como pasó en territorio bonaerense. En Avellaneda, el diputado nacional hubiese preferido que Axel Kicillof sólo pase a saludar por las comisiones de debate. Por eso las muecas y el dardo desde el escenario.
La “mesa Ensenada” encargada de avanzar con el operativo por CFK ya acordó distintas funciones que tiene en abril la próxima fecha. A estas provincias que representan el noroeste y noreste argentino se sumarán actos en el centro del país, en la Patagonia y en el interior bonaerense. Aunque CFK no da señales sobre su candidatura y Máximo Kirchner dice que su madre tiene que ser la dueña de la estrategia y no estar en una boleta, desde el kirchnerismo se entusiasman con la fecha del 25 de mayo, a veinte años de la asunción de Néstor Kirchner, para poder anunciar la postulación de la vice.
La titular del Senado sumará discursos en estos meses y el próximo será este martes en un acto de apoyo del Grupo Puebla. Allá el tema excluyente será el lawfare, pero la vice impondrá cada vez más el debate sobre el rumbo económico a sus discursos.
El 24 de marzo el kirchnerismo se prepara para volver a salir a la calle. Tal como lo hizo siempre, la columna principal de La Cámpora saldrá desde la Ex ESMA hacia plaza de Mayo. Después de una conversación con la presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto, el sector que pretendía posicionar a CFK como la protagonista de ese día entendió que se trataba de una fecha en la que la Memoria, Verdad y Justicia debía ser la consigna para marchar en contra de la dictadura.
De todos modos, en el comunicado que leerán los organismos de derechos humanos habrá un guiño al hablar de “Corporación judicial nunca más”. Alberto Fernández dejará un mensaje antes de viajar a República Dominicana para participar de la Cumbre Iberoamericana.
Al finalizar este acto, el kirchnerismo marchará a la Corte Suprema de Justicia. “De la plaza a la Corte” es la consigna de la militancia. Para el kirchnerismo hay una sola figura y es CFK.
