POLITICA

Cristina acusó a periodistas de Clarín y La Nación de nazis y antisemitas

En un acto oficial, la Presidenta se enfureció por lo que escribieron sobre el viceministro de Economía Axel Kicillof. Qué dijo del "poder" de La Cámpora.

La presidenta Cristina Fernández en el acto en el Museo del Bicentenario de la Casa Rosada.
| DyN

Junto a Amado Boudou, ministros y gobernadores, Cristina Fernández encabezó el lanzamiento del Plan Nacional de Igualdad Cultural. Luego de las extensas viceoconferencias con autoelogios a la gestión K, la Presidente descargó como nunca antes su ira contra los diarios La Nación y Clarín las columnas de opinión de periodista Carlos Pagni y Oslavdo Pepe sobre el viceministro de Economía Axel Kicilloff y La Cámpora.

La Jefa de Estado tildó al matutino de los Mitre de "antisemita", lo vinculó con "las ideas de Videla" a raíz de la columna titulada "Axel Kicillof, el marxista que desplazó a Boudou" publicada en la tapa de este lunes de La Nación.

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Si bien en distintos actos el Gobierno criticó a La Nación -como a Clarín, Noticias o diario PERFIL- desde el conflicto con el campo en 2008, sorprendió la virulencia en la agresión contra La Nación por el artículo de Pagni, a quien el kirchnerismo ya intentó, con un video montado, vincularlo a hechos delictivos.

"No me gustó para nada cuando hablan en el artículo del abuelo judío de Kicilloff, que escapó de algún progrom de Odessa. Tiene un tufillo antisemita", disparó la Presidenta.

Carlos Pagni no fue el único periodista crítico aludido en la alocución presidencial. "Me pareció muy nazi", dijo CFK luego de referirse durante minutos a una columna del editor del diario Clarín Osvaldo Pepe.

Y luego apuntó: "Lo que no me pareció tan gracioso es cuando decía que muchos de ellos, de los chicos son hijos o familiares de militantes montoneros. Los identifica el mismo gen (...) Me sonó a Menguele. Me pareció muy nazi".

Cristina aprovechó su discurso para respaldar a La Cámpora al viceministro de Economía, a quien ella designó como representante del Estado en Siderar (Techint) y luego como mano derecha de Hernán Lorenzino.

"Si la extrema derecha dice que es marxista y la extrema izquierda que es un revolucionario, entonces fijo que es peronista", dijo en defensa de Axel Kiciloff, el funcionario de La Cámpora.

Con las sonrisas cómplices de todo el auditorio, la Presidenta quiso minimizare el ascendente poder de La Cámpora en el Gobierno. "Acá dice que tienen tres intedencias cuando hay más de 2.000 en todo el país; que tienen tantos concejales cuando hay miles (...). Yo creo que estos chicos van a tener que trabajar más para tener poder", dijo en tono irónico.