Por las dudas, se queda en casa. Así se resume la decisión de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner de no utilizar el avión presidencial para viajar a determinados países. De manera de evitar un embargo de la flota argentina a mano de fondos buitre, la mandataria reconoció hoy, en plena reunión de Mercosur, por qué se niega a viajar en el Tango.
"Voy a ser extremadamente sincera, yo no puedo viajar a algunos países de Europa en el avión presidencial, que tiene inmunidad, porque en algunos países con rémora colonial todavía puede haber algún juez que pueda disponer un embargo, porque algún acreedor, buitre, no quiso entrar en los dos canjes de deuda y tengo que viajar en otro avión", planteó Fernández de Kirchner, con lo que recordó el embargo en Ghana de la Fragata Libertad, y equiparó, de alguna manera, la confiscación del patrimonio argentino con el rechazo de algunos países europeos de recibir al presidente Evo Morales, ante la sospecha de que podría llevar en su avión al exespía estadounidense Edward Snowden.
En su discurso en Cumbre de Presidentes del Mercosur, la mandataria volvió a solidarizarse con Morales, como lo hiciera días atrás la Unasur, y adelantó que se está trabajando en "resoluciones muy importante que tiene que ver con la dignidad de nuestros países y de nuestros pueblos".
Democratización para todos. Ya fuera de la agenda temática de la reunión, la jefa de Estado desvió su alocución hacia otros temas. "No hay democratización cuando se elije a un presidente en las urnas cada cuatro años" sino "cuando los ciudadanos y ciudadanas pueden acceder a los bienes y servicios para mejorar su calidad de vida", expresó.
La Presidenta convocó a sus pares a "trabajar mucho sobre una agenda" porque "la situación actual nos debe hacer pensar nuevas estrategias".
Cambio. El plenario de jefes y jefas de Estado del Mercosur se realizaba hoy en Montevideo, con la participación de la presidenta argentina, José Mujica (Uruguay), Morales (Bolivia), Dilma Rousseff (Brasil) y Nicolás Maduro (Venezuela).
Además de discutir el incómodo incidente de Morales en Europa, el encuentro sirvió para el ingreso de Surinam y Guyana como miembros asociados, y el traspaso de la presidencia pro témpore del bloque comercial de Uruguay a Venezuela, a pesar de la resistencia de Paraguay, suspendido tras el golpe institucional al presidente Fernando Lugo.
