La vicepresidente Cristina Kirchner cumple 68 años este viernes 19 de febrero y en su extensa trayectoria política fue protagonista de una incontable cantidad de peleas y discusiones que apuntaron a diferentes actores que van desde la oposición, dirigentes de su propio partido, sindicalistas, el campo, la justicia y hasta el periodismo.
Desde el inicio de su presidencia en 2007 hasta el fin de su segundo mandato en 2015 respondió a quienes criticaron su gestión. Si bien luego pasó un tiempo en el que supo utilizar el silencio como herramienta política, volvió con sus habituales confrontaciones durante la campaña electoral de 2017, cuando fue electa senadora nacional, y sobre todo en 2019, con su gira del libro Sinceramente y la elección presidencial, que la llevó nuevamente a lo más alto del poder político, en este caso como vicepresidente de Alberto Fernández.
El campo
A inicios de 2008, apenas a tres meses de su primera presidencia, el ministro de Economía Martín Lousteau anunció "la resolución 125". Esta iniciativa que planteó una fórmula que transforme el porcentaje retenido en móvil, en una relación inversa con el precio de los granos, terminó generando un conflicto que se extendió durante 129 días. Es que si el precio de la soja subía a 600 dólares la tonelada, la retención iba a ser de casi el 50%.
Los sectores agropecuarios comenzaron las medidas de protesta encabezados por la Mesa de Enlace Agropecuaria y se fueron sumando otros sectores de la sociedad. Hubo cortes de ruta, movilizaciones y cacerolazos en todo el país. En aquel momento, CFK criticó la protesta y los denominó como "piquetes de la abundancia" y aseguró que no se iba a dejar "extorsionar".
Este conflicto concluyó con un final de película en el Senado. La votación arrojó un empate y quien definió fue el vicepresidente, Julio Cobos, que era del radicalismo y que se unió al Gobierno, su voto no-positivo se convirtió en historia al revelarse contra la presidenta y provocar una dura derrota al kirchnerismo.
Grupo Clarín
La pelea con el campo no solo provocó un antes y un después con parte de la sociedad, sino también con el Grupo Clarín. Hasta ese momento, el multimedio encabezado por Héctor Magnetto había tenía una buena relación con Néstor Kirchner quien aprobó la fusión entre Multicanal, de Clarín, y Cablevisión.
Sin embargo, tras el conflicto del campo, en el que Clarín jugó a favor de los productores agropecuarios, comenzó una guerra interminable. El Gobierno de Cristina estatizó la televisación del fútbol con Fútbol Para Todos sacándole los derechos a Clarín y la Ley de Medios que impulsó el kirchnerismo y que afectaba principalmente a este multimedio, que se encargó de tener una línea editorial anti kirchnerista investigando los hechos de corrupción durante ese Gobierno.
Kirchnerismo vs. Clarín: cómo es la larga historia de la pelea
También el kirchnerismo atacó a Clarín por su relación con la dictadura avanzando en dos causas en particular. Primero la investigación de si los Noble Herrera habían sido bebés robados por la dictadura. Finalmente la justicia sobreseyó a la dueña de Clarín en la causa iniciada por la denuncia de Abuelas de Plaza de Mayo tras cruzar el ADN de los hijos de Herrera de Noble con datos del banco genético de familiares de desaparecidos.
La otra causa en cuestión fue la supuesta apropiación ilegal de Papel Prensa, en la que la Justicia también sobreseyó a los directivos de los diarios Clarín y La Nación en la causa que había promovido el kirchnerismo y que investigaba la adquisición de la papelera hace 40 años.
En su libro ‘Sinceramente’, Cristina Kirchner escribió sobre un encuentro con Magnetto en plena guerra, en 2013: "Recuerdo un día que, ya finalizada la sobremesa, íbamos caminando hacia la salida del comedor y Magnetto me dijo: ¿No pueden sacar la reforma?, la gente no está de acuerdo, la calle no está de acuerdo, hay mucha crítica y opinión negativa. Entonces le contesté: ‘Ay, Héctor -no le decía Magnetto, le decía Héctor-. ¿La calle? ¿Me lo dice en serio? ¿Usted cree que la calle sabe qué estamos discutiendo en el Senado? La calle ni siquiera sabe lo que es el Consejo de la Magistratura, son ustedes los que no están de acuerdo, no la calle. Mire, pueden seguir sacando 20 mil editoriales y artículos en mi contra que voy a seguir opinando lo mismo y votando lo mismo’”. También escribió: "Él tiene un fuerte interés por la política y no se trata solamente de un tema de lobby, para resguardar o mejorar sus intereses económicos, eso sería minimizarlo. Le interesa el poder de la política, el poder del sistema de decisiones, es decir, el poder en sentido estricto y completo”.
Hugo Moyano
Tras el fallecimiento de Néstor en 2010, la relación entre el líder de Camioneros y la presidenta se fue desgastando. Moyano comenzó a cuestionar al Gobierno y convocó a varios paros, principalmente por el impuesto a las Ganancias. "Estamos un poquito cansados del discurso armado. Si se parte de que la inflación del Indec no es real, el resto tampoco es real. La pobreza no es real, y se vive en una irrealidad", dijo Moyano mientras que en otra oportunidad agregó: "La bronca de la gente no será contra los trabajadores, sino contra la presidenta Cristina Kirchner". A la presidenta también le dijo que "no tiene noción de cuánto sale alimentar a una familia".
Por su lado, CFK respondió con algunas indirectas. Una de las más fuertes fue luego de que el periodista Horacio Verbitsky publicó que el líder de Camioneros "también integró la Juventud Peronista de la República Argentina, liderada por el asesor directo de López Rega, Julio Yessi, arrestado hace dos semanas en la causa de la Triple A".
Moyano reveló qué fue lo que desató su pelea con Cristina
"En el 74, de algunos dirigentes que andaban 'cazando zurdos'. Pero bueno, así son las cosas. Los archivos fotográficos son implacables. Implacables", dijo la por entonces presidenta en referencia a Moyano. "Acuérdense quiénes eran ustedes antes de Perón", expresó Cristina Kirchner a los sindicalistas que organizaron la tercera huelga general contra su gobierno. "Como decía Evita, le tengo más miedo al frío del corazón de los compañeros que olvidan de dónde vienen, que al de los oligarcas".
Sergio Massa
Fue ex jefe de Gabinete durante un año de la primera presidencia de Cristina. Luego, Massa rompió con el kirchnerismo y fundó su propio partido, el Frente Renovador, y en 2013 le ganó las elecciones legislativas al kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires. "Muchos de los actores que andan por ahí, reciclados, renovados o rejuvenecidos, siguen perteneciendo a viejas políticas que le trajeron mucho dolor al país", dijo CKF en plena campaña electoral.
Massa también buscó despegarse de su antigua relación con Cristina y hasta en una oportunidad manifestó: "La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner debería estar presa si no existiesen los fueros”.
En una de las tantas escuchas telefónicas a Cristina con Oscar Parrilli, critican a Massa y a su por entonces aliada política Margarita Stolbizer a quienes califica de "hijos de puta". Y sobre las denuncias de corrupción que hizo Stolbizer, Cristina dijo: "Y el que la manda a hacer eso es Sergio Massa. Hay que embocarlo a ese hijo de puta".
Finalmente, con Alberto Fernández como mediador, Massa se unió al kirchnerismo en las últimas elecciones. Actualmente Massa es presidente de la Cámara de Diputados y CFK del Senado y las diferencias, al menos públicamente, parecen haber quedado en el pasado.
Cristina Kirchner: "La apuesta de un gobierno de empresarios con Macri a la cabeza fracasó"
Mauricio Macri
Si un lado de la grieta es encabezada por Cristina, del otro lado está Macri. Nunca tuvieron una buena relación, siempre hubo tensión y cruces entre ambos. Primero con Macri como jefe de Gobierno porteño y Cristina presidenta, y luego con Macri presidente y CFK en la oposición.
En 2015, el líder del PRO se encargó de basar su campaña electoral en el anti kirchnerismo, marcando las causas de corrupción durante ese Gobierno. Y CFK le devolvió con la misma moneda en 2019, apuntando a la mala gestión económica de un "gobierno neoliberal".
Con dos ideas opuestas, se atacaron mutuamente en todos los ámbitos, desde las declaraciones públicas, cientos de acusaciones, hasta con causas judiciales.
La Justicia
Uno de los sectores a los que la vicepresidenta siempre apunta es a la Justicia. Acusando a los jueces y fiscales que la investigan de "lawfare" por las causas de corrupción que tiene abiertas. Ya en el primer año de gestión de la dupla Fernández-Fernández, apuntó casi exclusivamente a modificar la justicia, impulsando la reforma judicial y criticando a la Corte Suprema.
Acusada de formar parte de una "asociación ilícita", Cristina tiene varias causas como Los Sauces, Hotesur, Cuadernos de la corrupción, Vialidad, Dólar futuro, Memorándum de Entendimiento con Irán y direccionamiento de obras viales a favor del empresario Lázaro Báez en la provincia de Santa Cruz.
Gran parte de ellas, estaban en manos del juez federal Claudio Bonadio, quien citó en Comodoro Py a Cristina en algunas de esas causas y CFK se quejó de haber "sido sometida por el sicario judicial Claudio Bonadio a ocho indagatorias en un mismo día". Incluso, Bonadio dictó varias prisiones preventivas contra CFK, que no se efectivizaron debido a los fueros de la por entonces senadora.
Alberto Fernández
Fue jefe de Gabinete de Néstor y continuó en ese puesto en los primeros meses de Cristina, pero tras el conflicto con el campo fue uno de los que se fue del Gobierno. A partir de ahí, forjó una relación tirante con el kirchnerismo y se encargó de ser una de las voces peronistas que criticaron, principalmente, el segundo mandato de CFK.
"En el último mandato de Cristina es dificilísimo encontrar algo virtuoso", expresó en 2015 y agregó: "Cristina tuvo una enorme distorsión sobre la realidad, francamente lo digo. Si Cristina revisa las cosas que dijo, debería rectificarse un montón de cosas. Llegó a decir que Alemania estaba peor que nosotros en materia de pobreza. Sostuvo hasta el final que el cepo no existía y que la inflación no es importante. Eso es negación, es una negación terca, por momentos absurda".
Por su lado, CFK no hizo declaraciones públicas en relación a Alberto y la reunión que los volvió a unir fue en diciembre de 2017 en el Instituto Patria, luego de 10 años distanciados.
Paradoja amo y esclavo: Cristina y Alberto
En el libro escrito por Diego Shurman llamado "Alberto", el periodista cuenta que no se hablaron por 10 años tras el portazo de Alberto y que Cristina "se empacó y nunca más le atendió el teléfono". También relata aquella reunión donde limaron asperezas. Si bien el recibimiento fue amable, según explica el libro, Alberto pidió hablar de frente de las discrepancias que arrastraban: "A mí me dolió todo lo que pasó, no me quiero hacer el distraído como si no hubiera pasado nada. ¿Vos crees que yo soy un hombre de Clarín?", inició Fernández.
Cristina hizo silencio y Alberto insistió, a lo que CFK respondió: "¿Estás loco? ¡Yo nunca dije eso!". "Si vos no fuiste, vos dejaste que dijeran que yo soy Clarín, insistió Fernández y Cristina dijo: "¡No es así, Alberto! ¡De dónde sacaste eso!".
En ese momento, Alberto menciona el libro biográfico La Presidenta de la periodista Sandra Russo en el que se sugiere que Alberto era vocero de Clarín. "Bueno, eso lo dice Sandra Russo", dijo CFK e insiste: "Mirá te lo digo en la cara, no creo que seas operador de Clarín". "Me hiciste un daño enorme", reclama y la ex presidenta contesta: "Yo no creo eso. Si creyera eso no estarías hablando conmigo". En esa reunión Fernández le propone a Cristina que escriba un libro para responder a todas las acusaciones en su contra.
Poco a poco comenzaron a volver a forjar una relación hasta que el 18 de mayo de 2019, Cristina nombra a Alberto Fernández su candidato a Presidente. Pese a que ganaron las elecciones como dupla, a lo largo del primer año de gestión, la vicepresidenta lanzó algunas críticas internas como el famoso "funcionarios que no funcionan" y, si bien Fernández lo desmintió en varias oportunidades, persistieron los versiones sobre diferencias entre el presidente y su vice.
ED/CP