El juez federal Norberto Oyarbide fue nuevamente denunciado ayer ante el Consejo de la Magistratura, el órgano que elige y controla a los jueces, luego de haber sido apartado de dos de las causas más resonantes de su juzgado: el caso Schoklender y los fondos de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, y la investigación por supuesto lavado de dinero en los pases de jugadores de fútbol, conocida como “Alhec”.
Alejandro Fargosi, miembro del consejo en representación de los abogados, pidió ayer al organismo que “inicie el procedimiento de remoción” del juez y “se formule la acusación correspondiente y oportunamente se disponga la suspensión del juez”. El consejero acusó al magistrado de haber incurrido en mal desempeño de sus funciones y pidió que fuera destituido por el Jurado de Enjuiciamientos.
El domingo, PERFIL publicó un análisis de dos fallos de la Cámara Federal a través de los cuales Oyarbide fue apartado de ambas causas y el tribunal declaró la nulidad de todo lo actuado en ambos expedientes. En ambos fallos, la Cámara marca similitudes en el accionar del juez. En su denuncia, Fargosi pidió al Consejo que actuara de forma “urgente” para establecer:
* “Si el juez Oyarbide, adrede, ha provocado nulidades que generan demoras que eran evitables e innecesarias y si ello se debió a una intención consciente o a su desconocimiento grave del derecho”.
* Si Oyarbide incurrió “en el delito de privación ilegítima de la libertad de personas que no debieron ser detenidas”.
PERFIL contó que los fallos de la Cámara Federal –superiores directos de Oyarbide– acusaron al magistrado de supuestas irregularidades. Según los camaristas:
* En ninguna de las dos causa el juez explica cuáles son los hechos delictivos cometidos por los imputados, violando el Código Procesal Penal. Le endilgan que en sus causas “no se establece cuándo, cómo y dónde se cometieron los hechos investigados”.
* Aseguran que el juez detuvo irregularmente y sin razón jurídica a los sospechosos. Explican supuestas maniobras para sostener las investigaciones en sus manos y garantizarse que las causas queden en su poder.
* En las dos causas deciden apartarlo y enumeran una clase de derecho básico, como los apartados donde explican las atribuciones de un juez.
* En ambos casos, sostienen que el juez podría haber realizado una investigación sobre los hechos de forma correcta, pero que, en resumen, terminó sentenciando los expedientes a la nulidad.
* Lo acusan, también en las dos causas, de “violar garantías y derechos constitucionales”.
La relación incierta con los K
Oyarbide ya había sido denunciado por el consejero Fargosi por su desempeño en la causa de las escuchas, en la que el magistrado envió a Mauricio Macri a juicio oral.
Esa denuncia, cuya investigación estuvo a cargo del consejero K Carlos “Cuto” Moreno, no prosperó. El juez había sido denunciado en varias oportunidades y siempre salió ileso.
La relación actual del juez con el Gobierno es incierta. De hecho, los miembros de la Sala I de la Cámara Federal, que se encargaron de apartarlo de las dos causas y anularon todo lo actuado por Oyarbide, tienen en su haber varios fallos afines al Gobierno.
El Consejo de la Magistratura volvió a sesionar el jueves, luego de meses de inactividad. El tratamiento que los miembros K del Consejo den a la denuncia de Fargosi marcará si Oyarbide sigue o no siendo un juez “amigo” del Gobierno.