Si bien la residencia familiar de los Kirchner en Río Gallegos está cerrada, según la agencia Opi Santa Cruz, el lunes pasado se registraron algunos movimientos. La furgoneta de una empresa embaladora se estacionó en la puerta y algunas personas trasladaban cosas menores desde el interior de la casa.
La venta de la casa de Maipú y 25 de mayo en Río Gallegos es algo que todavía despierta, por lo menos, sospechas. A pesar de que algunos medios y allegados al Gobierno hicieron correr la versión de que la residencia habría sido vendida al filántropo Dowglas Tompkins y que se trasladaron muebles y hasta una caja fuere, lo concreto es que todavía permanece la custodia policial, la Ford F100 azul del casero y una de las camionetas Honda Civic, propiedad de Máximo Kirchner.
En Santa Cruz, algunos sectores descreen que la venta se haya efectuado y hasta sostienen que se habría efectuado una simulación para evitar que la gente reclame frente a la residencia.Otros hablan de una especie de “sobrefacturación”, con el supuesto precio de que la venta rondaría el millón de dólares.
Sea como sea, hace días que no se ve ni al matrimonio, ni a Máximo ni a la adolescente Florencia Kirchner, quien parece estar cada vez más acentada en Buenos Aires, entrar o salir de la casa. Todos
Hasta ahora, no se sabe a ciencia cierta si se concretó o no la venta, sin embargo, algunos afiliados a gremios que durante 2007 estuvieron en conflicto, aseguran que si es necesario reclamar frente a la Presidenta, no dudarían en ir a su casa en Río Gallegos, porque hasta ahora nadie duda que el dueño sigue siendo Néstor Kirchner.
