La provincia de Buenos Aires planea bajar el gasto político en 3.000 millones de pesos en 2018, con una reducción de 2.500 millones de pesos en el Poder Legislativo y 500 millones en el Ejecutivo.
Para poder lograr la reducción de esta enorme cifra, según precisaron, el jefe de Gabinete, Federico Salvai, y el ministro de Economía, Hernán Lacunza, eliminarán en total 150 cargos políticos pero "sin tocar personal".
La próxima semana, de acuerdo con lo adelantado por los funcionarios, se enviará a la Legislatura provincial un proyecto de ley de Ministerios, que apunta a lograr "una mayor celeridad y eficiencia" en la administración pública.
Asimismo, la semana próxima se presentará otro proyecto de ley para derogar las jubilaciones de privilegio de gobernadores, vicegobernadores y legisladores provinciales, hasta el momento beneficiados con una menor edad para acogerse al beneficio y menos años de aportes.
Los funcionarios destacaron que luego de "varias reuniones" con legisladores, las negociaciones "están muy avanzadas" para que se apruebe la reducción de gastos en la Legislatura bonaerense, que al ser un poder autónomo no depende de las decisiones de la gobernadora, María Eugenia Vidal.
"En la primera reunión hablamos de una reducción de 600 millones de pesos, en la última de 2.500 millones. Creo que no quieren reunirse otra vez", ironizó Salvai.
De todos modos, tanto Salvai como Lacunza advirtieron que si el Congreso provincial no aprueba la reducción de gastos, o bien acepta una baja menor a los 2.500 millones de pesos previstos, "se dejarán de hacer algunas obras" de infraestructura para compensar el desequilibrio en el gasto.
En el caso del Poder Ejecutivo Provincial, Salvai y Lacunza indicaron que existen en la actualidad 990 cargos políticos, fuera de la Gobernación, la Vicegobernación y los Ministerios.
Esos cargos se componen de 80 subsecretarías, 277 direcciones provinciales y 633 direcciones de línea. De esos 990 cargos se prevén eliminar 150 "con las respectivas plantas" que representan en total los 500 millones de pesos que se prevén ahorrar.
En el caso de la Legislatura, indicaron que por ley se le destina "el 1,5 por ciento del presupuesto" de la provincia, aunque hubo una modificación que le permitió incrementar sus erogaciones: antes, ese porcentaje se calculaba solamente sobre el Presupuesto de la Administración Central, pero luego se les agregaron los organismos descentralizados.
El gobierno bonaerense espera que los legisladores aprueben una modificación que baje ese porcentaje de 1,5 a 1,2, lo que permitiría la reducción del gasto de 2.500 millones de pesos.
Al pedírsele precisiones sobre qué gastos serían reducidos o eliminados, Lacunza advirtió que "en promedio, cada legislador provincial tiene 18 asesores", más del doble que los que tiene, por ejemplo, un par de la Ciudad de Buenos Aires.
