Si las diferencias entre las dos pericias no se pueden zanjar, corresponde que haya una tercera opinión”, aseguró la fiscal Viviana Fein a cargo de la investigación por la muerte del ex responsable de la UFI-AMIA Alberto Nisman tras conocerse el informe que presentaron los peritos de la querella con 12 conclusiones que ponen en entredicho puntos clave del reporte oficial.
Dar una tercera opinión, independiente, en eso es especialista el médico forense Duarte Nuno Vieira, presidente del Consejo Europeo de Medicina Legal y de la Red Iberoamericana de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Nacido en Portugal, el experto ganó el año pasado la medalla Douglas Lucas, la mayor distinción que otorga la Academia Americana de Ciencias Forenses, premio que le valió el calificativo de ‘el mejor CSI del mundo’.
Vieira trabajó como consultor forense para las Naciones Unidas, la Cruz Roja y el Comité Internacional de Rehabilitación para las víctimas de torturas. Hizo pericias en misiones internacionales en más de 25 países del mundo. En Suiza, Italia y Polonia fue llamado para ‘desempatar’ en conflictos por interpretaciones periciales, dada su calidad profesional. En un alto de su tarea docente, Vieira habló con PERFIL por teléfono sobre la práctica pericial.
—¿Qué pericias son clave para diferenciar en el caso de una muerte dudosa si se trata de un homicidio o suicidio?
—El diagnóstico diferencial entre homicidio, suicidio y accidente siempre se basa en un trípode. Por un lado, todas las informaciones que es posible obtener sobre el caso: los testimonios, los antecedentes de la víctima; lo que se llama la autopsia psicológica. Todo lo que puede ser relevante para demostrar si esa persona estaba deprimida, tenía problemas de salud o si había sido amenazada. Todos esos datos pueden orientar en un sentido u otro. Después, se basa también en el examen del lugar: la posición del cuerpo, los objetos, la situación de la ropa, etc. Y, finalmente, la autopsia física. Conjugando estos tres tipos de datos es que al final el tribunal establece un diagnóstico diferencial entre homicidio, suicidio o accidente. Sólo con la autopsia física no se puede hacer un diagnóstico diferencial.
—¿Puede un homicidio ‘disfrazarse’ de un suicidio?
Claro, se puede intentar disfrazar un homicidio en suicidio. Hay muchos casos publicados de homicidios donde se intentó montar una escena de suicido para evitar que se descubra. Todo depende del grado de saber y preparación de la gente que lo hace. Si fue hecho por profesionales, lo pueden enmascarar muy bien y tornar las cosas bastante complicadas en términos de diagnóstico diferencial.
—En ese caso, ¿qué pistas podrían resultar clave?
—Si se piensa que es un posible suicidio hay que ver su vida, entrevistar a sus amigos, familia y compañeros de trabajo; lo que se llama autopsia psicológica. Hay que ver si hay algo que pueda apuntar a que tenía una situación familiar compleja, problemas económicos o de salud, una situación de stress emocional, etc., que puedan justificar un suicidio. Si no hay nada en sus antecedentes personales o en sus antecedentes profesionales que puedan explicarnos un suicidio, es un factor en desfavor de la hipótesis de suicidio.
—En Argentina hay un fuerte debate porque los peritos oficiales del caso Nisman dicen que encontraron espasmo cadavérico y los de parte aseguran que no hubo espasmo porque hubo agonía. ¿La agonía es incompatible con el espasmo cadavérico?
—No sé en qué se basarán para afirmar que hubo agonía.
—Dicen que encontraron un charco de sangre cerca del cuerpo.
—No creo que lo digan por eso. Eso no significa nada. Si uno tiene un disparo en la cabeza la sangre puede continuar saliendo incluso cuando uno ya está muerto.
—¿El espasmo cadavérico es un dato importante a tener en cuenta?
—El espasmo cadavérico es algo que puede ocurrir. En las muertes con armas de fuego en la cabeza es una situación con alguna frecuencia.
—¿Se puede saber si hubo o no agonía?
—Eso se puede detectar en algunas circunstancias. Entiendo que en este caso no es por la cantidad de sangre en el suelo que lo vas a poder hacer. Pero hablo sin conocer la situación concreta y eso no me gusta. Hay que ver las imágenes, estudiarlo para ver qué interpretaciones son posibles. No puedo hacer conclusiones especulativas...
—¿Cómo se puede determinar la hora de muerte?
—Eso es muy difícil y habitualmente muy impreciso. Una de las formas más aproximadas es un Nomogram de Henssge: pero esto exige la determinación de la temperatura ambiental y la temperatura rectal del cuerpo en el lugar. El humor vítreo y los análisis bioquímicos aún no permiten una estimación fiable del intervalo
post-mortem.
“La contaminación del lugar puede conducir a un desastre pericial”
Los resultados del peritaje encargado por Arroyo Salgado aseguran que el cuerpo del fiscal Nisman fue movido, otro punto en discusión. Viviana Fein explicó que desde que ella entró al baño del departamento del edificio Le Parc de Puerto Madero no se movió, pero que no puede “aseverar lo que ha sucedido durante las tres horas antes” de su arribo. “El escenario estuvo sin presencia de autoridades judiciales desde las 22:30 hasta la 1:30”, detalló. Qué pasó durante esas tres horas es una de las preguntas a contestar, ya que como apuntó el médico forense Duarte Nuno Vieira, “la preservación del lugar de los hechos es un punto fundamental”. Para el especialista, “todos los artefactos que se pueden introducir pueden condicionar interpretaciones periciales absolutamente incorrectas y conducir a un desastre pericial”. Por eso, la preservación del lugar de los hechos y un examen lo más rápido posible que arroje resultados de una forma correcta son fundamentales. “Un lugar de los hechos alterado, contaminado, creará dificultades a la hora de hacer un diagnóstico diferencial”.