Otra medida clave en la causa por enriquecimiento ilícito contra el ex secretario de Obras Públicas José López será traer a las monjas del monasterio de General Rodríguez a declarar como testigos. Así lo pedirá el fiscal federal Federico Delgado en los próximos días, adelantaron a PERFIL fuentes judiciales.
Una de las mujeres que vive en el monasterio Nuestra Señora de Fátima ya declaró en la causa que se inició en General Rodríguez –y que será añadida a la del fuero federal–. La religiosa, de 90 años, fue una de las monjas que le permitió a López ingresar al lugar antes de ser detenido. Delgado quiere que expliquen sobre las visitas de López al monasterio y su relación con el lugar.
“Era un hombre muy bueno, pero estaba medio loco. Hoy vino. Estaba loco. Dijo: ‘Me van a robar. Porque yo robé dinero para venir a ayudar acá’”, relató la anciana a radio La Red. Ante la Justicia bonaerense declaró: “Me dijo que robó, que va a ir preso y que antes de ir preso nos quería donar lo que traía”.
El arzobispo de Santa Fe y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, José María Arancedo, señaló ayer que “no es apropiado culpar a las monjas” y afirmó que desde el Episcopado “colaborará en todo lo necesario”.
Este monasterio de las Monjas Orantes y Penitentes de Nuestra Señora de Fátima era frecuentado por el ex funcionario. El arzobispo Rubén Héctor Di Monte vivió en el lugar antes de fallecer en febrero, y mantenía estrecha relación con el gobierno kirchnerista.