El juicio contra Daniel Varizat, el ex funcionario K procesado por más de 20 delitos luego de atropellar a manifestantes en una marcha en Río Gallegos, se quedó sin querellantes, luego de que la Cámara Criminal de esa ciudad decretara el cese de su intervención.
De esta manera, el juicio oral contra Varizat se queda, insólitamente, sin víctimas. “La maniobra es clara: quieren sacar de la cancha a los querellantes y reducir la causa a la actuación del acusador, la defensa y el Juez. Un hecho sin precedentes en la provincia y en el país”, publicó la agencia local OPI Santa Cruz .
En efecto, la Cámara Criminal de Río Gallegos notificó la decisión del cese de la intervención de la parte querellante en el proceso seguido contra Varizat por más de veinte delitos cometidos en el 2007 cuando el entonces funcionario provincial arremetió contra manifestantes en pleno centro de la ciudad.
“Quieren sacar de la cancha a los querellantes. Pretenden que todo se circunscriba a un acusador, al defensor y al juez; es un escándalo sin precedentes en la justicia de la provincia y diría nacional”, señaló Javier Pérez Gallart, uno de los abogados de la querella.
Uno de los firmantes de la decisión es Eduardo Chávez, un magistrado que acaba de ser ascendido a juez del Tribunal Oral Federal de la provincia y que tiene una larga historia política vinculada con el kirchnerismo. La otra firmante es Alicia de los Angeles Mercau, cuyo pliego acaba de ser remitido al Superior Tribunal de Justicia de la provincia, es decir, está a la espera de ser designada allí.
“Con esta Resolución presentada como una salvaguarda a la defensa en juicio se viola el derecho de los querellantes. No hay dudas que al poder político con gran manipulación de la justicia no le interesa que haya acusaciones privadas contra Varizat porque especulan que la Fiscalía podría ser más benigna en su acusación” remarcó otro de los abogados de la querella y ex fiscal, Andrés Vivanco.
La causa Varizat ha tenido sospechosos vaivenes que demostraron un intento solapado por demorar tanto el juicio oral como trabar su avance. En efecto, cuando la causa fue a la Cámara, se detectaron cuestiones formales que hicieron que tenga que ser devuelta al Juez. “Esta fue la primera señal de cómo se iba a tratar la causa, que se confirma con esta medida realmente ridícula que no hay duda tiene el objetivo de dejar a todos los querellantes particulares fuera del proceso”, remarcó Vivanco, quien asegura que de esta forma se evita que se aporten los más de 50 testigos y las pruebas que hay respecto del ilícito cometido por Varizat.
