Mauricio Macri lo sabe: en estos días Hugo Moyano se sintió desplazado del esquema de decisiones y hasta se opuso a varios de los nombres que sonaron para la cartera de Trabajo, hasta que se oficializó el desembarco de Jorge Triaca (hijo). Aunque fuentes del macrismo adelantaron que no le abrirán los ministerios para cargos, Macri tiene previsto darle un rol político.
Hoy la relación es tirante. “Hugo siente que ayudó y todavía no hablaron con él. La tropa de abajo del camionero tenía alguna aspiración que nosotros nunca hablamos”, confiaron. Acaso por ello, para destrabar los roces, entre el jueves y el viernes de la semana que viene se reunirán cara a cara.
“Hugo no quiere un cargo sino liderar el proceso de transformación desde los trabajadores para retirarse, quiere liderar el pacto social”, acota otra fuente. En este sentido, en principio Macri había pensado un ministro de Trabajo “gerencial” que pueda juntar a empresarios con sindicatos. Si bien primero se lanzaron varios nombres, terminó optando por Triaca, uno de los grandes animadores de la “mesa sindical” del PRO, y quien, si bien estuvo más cerca de los “Gordos”, tiene buena relación con los gremios K, con Luis Barrionuevo y con los moyanistas. “No le subamos el precio a nada porque está todo bien. Más allá de que Hugo quiera negociar algunas cosas, hay buen diálogo”, se lo escuchó decir al flamante ministro de Trabajo ante otros futuros colegas del gabinete. Pragmático y peronista, fue clave para el acercamiento de Macri a sindicalistas en los últimos dos años.
Macri y Moyano vienen construyendo un vínculo de respeto mutuo y negocios, a través de la recolección de basura pero también de apoyo político. Fotos, asados y gestos concretos (como indemnizaciones millonarias a empleados de basura) fueron algunas. Macri armó así la “mesa sindical”. En la Provincia, María Eugenia Vidal dio el primer gesto hacia Moyano: colocó a Ezequiel Sabor, subsecretario de Trabajo porteño, en el área de Trabajo. El Momo Venegas sugirió un nombre para ese lugar. El camionero le hizo llegar un mensaje a Vidal a través de un interlocutor: “Decile a la piba que se fije, al del Momo no le gusta mucho el laburo”.
El futuro ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, también se reunió con Moyano en un par de oportunidades y le mostró su plan vial nacional con mejoras para sus afiliados: controles de carga y descarga, centros de transferencia de los camiones al ferrocarril y paradores para camioneros en todo el país.